Pocas horas después de haber pedido una licencia "por motivos de salud", el senador del PAN Miguel Ángel Yunes Márquez volvió a aparecer en público al llegar a Xicoténcatl, la sede alterna del Senado, acompañado por su padre y senador suplente, Miguel Ángel Yunes Linares. Posteriormente, tras la interrupción de la sesión por parte de manifestantes y trabajadores del Poder Judicial, el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, anunció que Yunes Márquez se reincorporaba a sus funciones. Y tanto al padre como al hijo fueron etiquetados como “traidores” por el presidente del PAN, Marko Cortés, quien incluso amenazó con expulsarlos del partido. Durante su intervención en la sesión del Senado, el legislador del PAN, Miguel Ángel Yunes Márquez, manifestó su respaldo a la reforma judicial y defendió su posición ante las críticas que ha recibido. Enfrentó las acusaciones de ser un "cobarde" o "traidor" con firmeza, asegurando que, pese a las críticas, su decisión no se ha visto afectada.Entre abucheos y aplausos declaró que “en una de las decisiones más difíciles de mi vida, he decidido votar a favor del dictamen que propone un nuevo modelo de impartición de justicia”. Asimismo, denunció que había sido objeto de un “linchamiento público” y enfrentado agresiones dentro de su propio partido debido a su breve ausencia en el debate sobre la reforma, la cual atribuyó a problemas de salud. Aseguró que no permitirá que se le dicte cómo votar “en ningún caso”.“México no se desmoronará ni el sistema de justicia cambiará automáticamente con esta reforma... No estoy dispuesto a restringir mi libertad bajo amenazas”, afirmó en el Pleno. Hizo hincapié en que “nada justifica el enfrentamiento y la polarización”, y abogó por un entorno de estabilidad y armonía, especialmente con la llegada de un nuevo gobierno federal. “Deseo, por el bien de México, que dejemos atrás la falta de diálogo entre el Ejecutivo y las fuerzas políticas y que juntos construyamos una realidad mejor”, dijo Yunes Márquez, interrumpido varias veces por la oposición. Agregó: “Nos intentan clasificar como ángeles o demonios... No he venido al Senado a buscar beneficios personales ni venganzas políticas; he venido a luchar por un México justo... No es traición actuar de acuerdo con los principios, se necesita más valor para ir contra la corriente que seguirla. El tiempo lo dirá”. “Yo no estoy de acuerdo en restringir mi libertad por amenazas”, declaró Yunes Márquez.El voto de Miguel Ángel Yunes Márquez es crucial en el debate sobre la reforma judicial, pues su apoyo permitiría a Morena y sus aliados alcanzar la mayoría calificada necesaria para aprobar la iniciativa. La reforma, ya aprobada por la Cámara de Diputados, aún requiere el respaldo de dos tercios en el Senado. La cifra exacta de senadores necesarios para alcanzar esta mayoría calificada ha sido motivo de debate, con algunos afirmando que se necesitan 85 y otros que son 86. EE
