El presidente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), Joel Ayala Almeida, decidió que los médicos, enfermeras, demás personal paramédico y los administrativos de admisión dejen de prestar sus servicios a enfermos contagiados de COVID-19, en caso de carecer de los materiales de protección sanitaria."Los trabajadores de la rama médica tienen que estar dotados de lo fundamental: tener tapabocas de alta densidad, mascarillas lentes, guantes, batas desechables", dijo Ayala Almeida, en entrevista radiofónica con el periodista Ciro Gómez Leyva.Señaló: "Los trabajadores que no cuente con esta seguridad preventiva de la transmisión del virus, no van a participar en la atención a pacientes sospechosos de contagio". Esta medida de protección, dijo, debe ser "desde ayer"."Sólo con equipo de protección, los trabajadores estarán al frente de esta emergencia sanitaria; los que no cuenten con materiales estarán aparte, ajenos, no participarán", sostuvo el líder de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE).Esta decisión se asume, subrayó, "por su integridad, prevenir contagios, como ya ha habido casos de médicos, enfermeras, trabajadores de la salud que contagian a su familia, al resto de los que atienden directamente".Ellos tienen que estar "blindados", pues de otra manera, "son vulnerables a la transmisión del virus, y tendríamos un problema mayor, en derrame generalizado".Refirió el presidente de la FSTSE que desde el año pasado su organización y los sindicatos de la SSa e ISSSTE advirtieron de las carencias de insumos, así como de medicamentos, "hasta de jabón", dijo.Informó que la FSTSE ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias los espacios de sus organizaciones federadas, como de la misma central sindical para que se instalen hospitales destinados a la atención exclusiva de enfermos positivos de COVID-19."Los hospitales están saturados con enfermos de diversos padecimientos", y los que tienen COVID-19 deben estar aislados, señaló.NR