Este jueves, la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) de Estados Unidos declaró la muerte del fenómeno "El Niño", el cual calienta partes del Pacífico central. Este fenómeno, que aumenta las temperaturas mundiales, ya no está, mientras los expertos pronostican que su contraparte, "La Niña", comience a afectar el clima en verano.Según el Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, "La Niña" es parte del fenómeno conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS). Este se divide en dos fases: la fase de "El Niño", donde se presenta un calentamiento anómalo en el océano Pacífico, y la fase de "La Niña", donde se enfría."La Niña" nace a raíz de un proceso donde hay un enfriamiento anómalo en el océano, situación que genera cambios en la manera en la que se mueven las masas de aire, favoreciendo la formación de lluvias intensas en algunas áreas o sequías extremas en otras.El fenómeno meteorológico nos afecta porque las condiciones de sequía se vuelven extremas y se agravan todos los problemas relacionados con los recursos hídricos.Sin embargo, puede suceder un evento diferente: que llueva mucho y se provoquen inundaciones.Según la UNAM, los efectos del fenómeno de "La Niña" son diferentes en las distintas regiones del mundo y de México.Por ejemplo, en el norte de México, "La Niña" genera condiciones que favorecen la sequía: mucha de la humedad y la precipitación que llega a través de, por ejemplo, frentes fríos, deja de venir porque la circulación atmosférica empuja esos fenómenos más hacia el noroeste de los Estados Unidos, donde se vuelve mucho más lluvioso. Por otro lado, el sur de México se vuelve un poco más húmedo.La última vez que estuvo presente duró tres años consecutivos. Según Alejandro Jaramillo Moreno, investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC), explicó en la Gaceta de la UNAM del pasado 16 de mayo, que "el periodo de actividad de un evento es aproximadamente de un año. Comienza más o menos en la primavera y termina en la misma temporada del año siguiente, con su mayor actividad en nuestro invierno; el pico de actividad sería en diciembre".Señaló que cuando se dio el cambio el año pasado "veníamos de tres años consecutivos de 'La Niña' y pasamos a condiciones de 'El Niño'. Con este, las aguas del Pacífico se calentaron, ocurrió un acoplamiento con la atmósfera y los patrones de circulación atmosférica cambiaron en todo el planeta y trajo consecuencias".Mencionó como ejemplo, "la temporada de ciclones tropicales en el Pacífico fue más activa de lo normal, y tenemos el caso del huracán 'Otis', que lo podemos asociar muy particularmente a condiciones que favorecieron 'El Niño'"."La Niña" suele causar que el océano Atlántico tenga mayor actividad en cuanto al desarrollo de ciclones tropicales y eso es lo que se pronostica para el verano de 2024.*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsAppOF