En 2025, la jornada laboral de 40 horas será uno de los temas centrales en el ámbito laboral mexicano. El Gobierno mexicano está impulsando una reforma en la Ley Federal del Trabajo (LFT), que propone una reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales. Este cambio busca mejorar la calidad de vida de los trabajadores, otorgándoles más tiempo para sus actividades personales y familiares, lo que repercute en un equilibrio más saludable entre el trabajo y la vida privada.Uno de los principales aspectos de la reforma es la inclusión de dos días de descanso obligatorio adicionales para los empleados. Los días de descanso obligatorio están establecidos en el artículo 74 de la LFT y no pueden ser modificados por los empleadores de manera arbitraria.Además, la reforma trae consigo un beneficio importante para el sector bancario. Los trabajadores de este sector tendrán dos días adicionales de descanso obligatorio durante la Semana Santa, específicamente el 17 y 18 de abril, lo que representa una mejora significativa en sus condiciones laborales en comparación con 2024, cuando estos días no formaban parte del calendario de descanso.Este cambio no solo busca ofrecer más tiempo libre a los trabajadores, sino también mejorar su bienestar general. Expertos coinciden en que la reducción de horas laborales, junto con días de descanso adicionales, podría fomentar un mejor equilibrio entre la vida profesional y personal, lo que llevaría a una mayor satisfacción laboral y, en consecuencia, a una mejora en el desempeño laboral.La propuesta de reforma, en general, tiene el potencial de impactar positivamente en la productividad a largo plazo. Al otorgarles a los trabajadores más tiempo para descansar, es probable que su eficiencia y motivación aumenten, lo que beneficiaría tanto a los empleados como a los empleadores.SV