Este lunes activistas del colectivo Chopeke inauguraron un mural en la rivera del Río Bravo, arte que refleja los lazos que unen a Ciudad Juárez y El Paso, ciudades fronterizas de México y Estados Unidos.Entre las imágenes que se representaron en el mural plasmado en el bordo de dicho río destacan unas manos que representan las culturas de México y Estados Unidos, que se fusionan a través de su gente.También se aprecia una sombra de un adulto y un niño, lo que recuerda a los menores migrantes que se dirigen, acompañados o no, hacia Estados Unidos en busca del "sueño americano".La obra tiene una dimensión de 180 metros cuadrados y en su elaboración participaron más de ocho personas que le dedicaron entre cuatro y ocho horas diarias durante dos semanas."El mural habla de dos países y dos entidades que están unidas. Internacionalmente hay un problema que no alcanzamos a distinguir y este tipo de protesta pacífica plasma cómo estamos unidos por historias de familias, más que por la política internacional", dijo Jorge Pérez, artista que dirigió la obra.Él es mexicano, pero de padres y abuelos estadounidenses y lleva años sin cruzar a Estados Unidos. "Yo no he movido un dedo para visitar aquel país. Han llevado mis obras a exponer a museos de El Paso y a través de mi arte estoy presente en ese país", confesó.Además, el artista abrió una panadería hace dos años y dona piezas de pan a distintos albergues de Ciudad Juárez, como muestra de su interés en la migración y en estos temas binacionales.Aunque en el discurso de ambas naciones es de trabajo conjunto para solucionar el conflicto de la migración, por el momento la crisis migratoria persiste y se ve lejos una posible solución.Como muestra, la ola migratoria sacudió en 2021 a México con el arribo de cientos de miles de extranjeros, en su mayoría centroamericanos y haitianos, que llegaron al país para luego tratar de llegar a Estados Unidos.En los primeros once meses del 2021, 123 mil migrantes solicitaron asilo en México, un récord absoluto.AF