El gobierno de la Ciudad de México inició esta tarde una mesa de diálogo privada con los líderes de organizaciones campesinas que buscaban incorporar su protesta al desfile de la Revolución Mexicana.Fuentes del gobierno capitalino dijeron que la mesa es encabezada por la secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, y otros funcionarios, quienes convencieron a los dirigentes de ingresar al edificio de la administración local para dialogar.Sin embargo, éstos al ingresar y ser sometidos a revisión por personal de seguridad del edificio, no aceptaron y salieron. De inmediato se les conminó a volver a ingresar sin dicha inspección, a lo que finalmente accedieron.La marcha de una veintena de líderes campesinos procedente de su plantón en la Cámara de Diputados llegó al mediodía a las inmediaciones del Zócalo Capitalino, adonde no pudo ingresar debido a que se realizaba la representación histórica de la Revolución Mexicana.Los dirigentes encabezados por Álvaro López y Marco Antonio Ortiz se reunieron en la esquina de Venustiano Carranza y Pino Suárez, donde hubo un momento de tensión cuando un grupo de asistentes comenzó a insultarles y ellos trataron de quitar las vallas para entrar a la zona de contingentes del desfile.El subsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta, señaló que las organizaciones campesinas que bloquean la Cámara de Diputados y amagaron con llegar al Zócalo capitalino para boicotear el desfile con motivo del 109 aniversario de la Revolución Mexicana tienen derecho de manifestarse, pero no de justificar con una movilización social sus intereses personales."Son libres de deambular y de transitar por cualquier sitio de la ciudad, pero en este caso tienen que permitir el desfile, tienen el derecho de transitar y admirar el gran desfile... que no quieran justificar una movilización social para conseguir recursos para intereses propios con la situación desafortunada de miles de campesinos en nuestro país", expresó.En entrevista antes de que diera inicio la escenificación y el desfile con motivo de la conmemoración, Peralta detalló que a estas organizaciones, la Secretaría de Gobernación les instaló una mesa de diálogo con ocho subsecretarios y el procurador agrario, pero 'desdeñaron' la invitación y mantuvieron bloqueado el recinto por cuatro días."Fuimos desdeñados por esas organizaciones. Les constituimos una mesa con ocho subsecretarios federales, con el procurador agrario, y ellos mismos señalaron que no éramos funcionarios de nivel, que ellos solamente se reunían con presidentes para arriba, lo digo con toda puntualidad, como ellos lo señalaron y con el sarcasmo con que lo dijeron", acusó.El subsecretario también aseguró que las intenciones de esas organizaciones -específicamente mencionó a Álvaro López Ríos, dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA)- es la de "conseguir recursos para su organización, no para los campesinos".Con información de El Universal