El fiscal general de Estados Unidos (EU), William Barr, se mostró en desacuerdo con la iniciativa enviada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador para limitar a agentes extranjeros en el país, misma que ya fue aprobada en el Senado.La regulación restringiría y podría monitorear las actividades de los agentes estadounidenses, como aquellos de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), algo que el Departamento de Justicia aseguró, “sólo beneficiaría a los cárteles del narcotráfico” y limitaría la cooperación entre México y EU.“Nos preocupa la legislación que actualmente se encuentra en el Congreso mexicano, lo que tendría el efecto de dificultar la cooperación entre nuestros países. Haría menos seguros a los ciudadanos de México y Estados Unidos. La aprobación de esta legislación sólo puede beneficiar a las violentas organizaciones transnacionales y otros criminales que estamos combatiendo conjuntamente”, señaló el fiscal.
