El secretario de Infraestructura del Gobierno de Puebla, Juan Daniel Gámez Murillo, informó que suman 183 viviendas evaluadas tras la explosión de un toma clandestina de Pemex y que presentan algún tipo de afectación.El funcionario estatal reveló que la Secretaría de la Defensa Nacional les liberó el área afectada, por lo cual ahora quedará a cargo de la autoridad civil para remover escombros.En conferencia de prensa encabezada por el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, informó que por ello iniciaron el retiro de escombros en un entronque de la zona siniestrada.Se espera que en un lapso de dos semanas retiren escombros y lleven a cabo la demolición de casas habitación afectadas en su totalidad por la explosión.Habitantes de la Junta Auxiliar de San Pablo Xochimehuacan, donde ocurrió una explosión en un ducto de gas, rompieron el cerco de seguridad de la denominada "zona cero".Los pobladores sacaron parte de sus pertenencias que se encontraban en sus viviendas cerradas desde el domingo pasado cuando ocurrió la accidente por una toma clandestina.Ante la mirada de efectivos del Ejército mexicano, Guardia Nacional y policías locales, los habitantes ingresaron a sus viviendas para rescatar cosas de valor.Pantallas de televisión, ropa, muebles, refrigeradores y hasta vehículos fueron extraídos por los vecinos.JM
