"Justicia, todos somos Genaro", gritaron cientos de ciudadanos afuera de la Comisaría de Seguridad Pública de Navojoa, Sonora donde la madrugada del 2 de mayo el joven murió en una celda, horas después de grabar a un policía cuando sin motivo lo aprehendía.Varias personas expusieron que han vivido en carne propia el abuso policiaco y que el crimen cometido contra Genaro Ruiz, quien esa noche había ingerido bebidas alcohólicas pero viajaba en el asiento del copiloto, es injusto y ni siquiera debió ser detenido.Margarita Chávez dijo que hace tres años su familia fue víctima de los policías municipales. Su hijo fue golpeado en forma salvaje a unos metros de su casa, junto a otros jóvenes cuando regresaban en la madrugada de la fiesta de graduación de la preparatoria. Incluso hubo disparos.Ella llegó corriendo al lugar donde lo estaban golpeando, y sólo recibió un "disculpe, lo confundimos". Su hijo duró dos años en recuperarse físicamente, pero aún sufre secuelas.En octubre del 2017, en la comunidad de Masiaca, municipio de Navojoa, Gadiel Alonso de 24 años de edad, un joven que se encontraba mal de sus facultades mentales, fue abatido a tiros por policías.En un ataque de alucinaciones rompió el cristal de un vehículo. Al llegar los policías vieron que traía un cuchillo, su hermana les gritaba que no le hicieran nada que estaba enfermo, que lo controlaría, y en respuesta le dispararon, según testimonio familiar.Sucedieron otros testimonios que comprometen la actuación policiaca, por lo que los manifestantes exigieron que se realice un antidoping a los elementos de seguridad porque sospechan que estas actuaciones de violencia no las hacen en "sano juicio".Este domingo, familiares y amigos de Genaro Ruiz se reunieron en la plaza 5 de Mayo, de donde marcharon hacia la Comisaría de Seguridad Pública donde exigieron la destitución del titular Valentín Gámez Granados.DR