Tras el ataque de este lunes en contra de la familia LeBarón, en el que nueve personas fueron asesinadas, el activista Javier Sicilia consideró que es momento de que la sociedad vuelva a protestar en las calles contra la violencia.Señaló que "es necesario (volver a las calles), nada más que ahorita la punta del iceberg la tienen los LeBarón y Julián en particular, porque es un emblema importante de este país".En ese sentido, mencionó que él ya no cuenta con capacidad de convocatoria, pero agregó que LeBarón sí la puede tener. "Creo que ya es tiempo de volver otra vez a sentar a los poderes con el pueblo detrás, ese pueblo que tanto elogia Andrés Manuel (López Obrador)."Esto, para decirles y volverles a exigir y ponerles sobre la mesa el camino correcto que hay que asumir junto con nosotros para salir del problema… no sé qué más necesita sufrir este país para poder articularse nuevamente y decir un verdadero ¡ya basta!", agregó.Por otra parte, a través de una carta a Julián Lebarón, expresó que antes pensaban que podían detener el horror, pero no fue así porque "el poder, con otros rostros, con otros nombres, con otras maneras, continúa mintiendo, encubriendo la realidad, consintiendo la barbarie que, como lo dijimos entonces, está enquistada en el Estado como un repugnante lodo".Ante la masacre, se pregunta en la misiva, si no es tiempo de que el pueblo de México "vuelva a congregarse para sentar al poder, no a exigirle, sino a obligarlo a realizar una verdadera política de verdad, justicia y paz."Una política con la que Andrés Manuel se comprometió, y que a lo largo de un año de mandato traicionó y que se mide con centenas de miles de muertos, desaparecidos, de las que las mujeres y los niños asesinados de tu comunidad son la nueva punta del iceberg", añadió.En la carta, Javier Sicilia también se pregunta si después de tantos niños, mujeres, hombres y ancianos asesinados y desaparecidos, "no es ya tiempo de poner un verdadero alto a tanto dolor, tanta muerte, a tanta humillación, a tanta mentira; si no es ya tiempo de que en el sufrimiento palpite de nuevo el corazón y la tierra pueda florecer; tiempo de que sea tiempo"."No lo sé. Lo que sí sé es que en este abrazo y mis preguntas, te digo lo mucho que te quiero, lo mucho que me duelen tus mujeres y niños, lo mucho que te llevo ya conmigo, compañero del alma, compañero".NR