En medio de los rebrotes de coronavirus que registra México la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que mientras llega la vacuna se invitará a las familias al "autoconfinamiento" y se mantendrá el diálogo con todos los gobiernos de los estados; asimismo, descartó medidas coercitivas y toques de queda como en Europa.Expuso que el Gobierno federal desde el inicio de la pandemia decidió no imponer ninguna medida restrictiva y conminó a las personas a que por su propia voluntad se confinen.Durante su participación en la Reunión Anual de Industriales y de la Industrial Transformation México de la Hannover Messe, afirmó: "Nosotros no vamos a tener un toque de queda, tampoco vamos a imponer sanciones a quienes no cumplan las medidas obligadas para la protección a la salud".Otra de las acciones que también se mantienen es el tener comunicación constante con los gobernadores para analizar las condiciones propias de cada entidad y ver los semáforos de acuerdo a las circunstancias.Dijo que desde 2019 se firmó un acuerdo de gobernabilidad y se acordó que la Secretaría de Gobernación sería el único vínculo de comunicación permanente con el gobierno federal, "este diálogo se va a mantener" hasta después de la pandemia.La funcionaria también afirmó que "contamos con herramientas de comunicación con las entidades federativas, de tal manera que mantengo esta constante comunicación con todos los gobernadores, y precisamente el mes próximo nos reuniremos una vez más con todos ellos para analizar el estado actual del semáforo y tomar las decisiones sobre los siguientes días".Expuso que el gobierno espera la vacuna contra el nuevo coronavirus para fines del 2020 o principios del 2021, pero si se atrasa la vacuna el gobierno cuenta con los recursos e instrumentará las medidas necesarias para proteger a la población.JM