La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, consideró que no se aceleró el desconfinamiento tras implementar el semáforo naranja pues se realizó un buen trabajo y la hospitalización de pacientes con COVID-19 sigue disminuyendo, aunque en las próximas semanas se verá el impacto real por la reapertura."En la Ciudad sigue disminuyendo la hospitalización, lento pero en una tendencia negativa, lo cual es muy importante. Las pruebas nos ayudan a ver tempranamente si crece la epidemia, hasta ahora, el porcentaje de positivos sigue reduciéndose, también lentamente, pero sigue reduciéndose"."La semana que entra es muy importante porque ya serían 15 días de la reapertura del semáforo naranja. Aquí lo importante es seguir dando un seguimiento permanente y permitir también, siempre poniendo la salud por delante", dijo.Estas declaraciones se dan luego de que el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, manifestara su preocupación por un posible rebrote ante la reapertura anticipada.La mandataria local expuso que siempre se puso la salud por delante, pero se buscó un balance en donde ya no se pierdan más empleos en la Ciudad, que pueda abrirse de manera segura y al mismo tiempo, seguir atendiendo los casos graves.Asimismo, ante el señalamiento de López-Gatell de que algunas entidades tienen un rezago de diagnósticos y confirmaciones, Sheinbaum Pardo no quiso opinar sobre los demás estados de la República; sin embargo, comentó que la Ciudad de México está en total coordinación con la Federación.JM