Ayer, integrantes del pueblo wixárika de San Sebastián Teponahuaxtlán y de Tuxpan de Bolaños, Jalisco, quienes salieron de sus comunidades desde el 25 de abril, marchaban por la carretera Panamericana, en dirección Atlacomulco-Ixtluahuaca, con intención de hacer una parada en el municipio mexiquense de Ixtlahuaca antes de llegar a la Ciudad de México para exigir al gobierno federal la restitución de más de 10 mil 500 hectáreas en Huajamic, municipio de la Yesca, en Nayarit, invadidas por ganaderos desde hace varios años.El comisariado de bienes comunales de San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan de Bolaños, Óscar Hernández, dijo que la pretención es llegar a Palacio Nacional para entrevistarse personalmente con el presidente Andrés Manuel López Obrador y que le planteen sus demandas."La comunidad emitió unas demandas y todas fueron ganadas en los tribunales a favor de la comunidad y lo que falta nada más es ejecutar, ya tiene varios años que no se ejecutan y tenemos miedo a que se amparen esas sentencias ganadas y por eso la desesperación, la presión de la gente tomamos esta decisión de ir a visitar al presidente", comentó.Los ganaderos nayaritas de Huajimic usufructúan sus tierras desde hace varios años, por lo que interpusieron varios recursos legales para recuperarlas y la justicia agraria falló a su favor, pero los ganaderos que tienen la posesión no las han dejado porque pretenden una indemnización, lo que ha retrasado el proceso de recuperación de las parcelas del pueblo indígena wixárika."Hasta el momento los ganaderos aceptan que sí son de nosotros las tierras, pero por el tiempo que tienen, ellos ponen sus pretextos, pero ellos son conscientes de que sí nos pertenecen las tierras, son de la comunidad. Ellos se dedican a la ganadería y a sembrar. Nosotros no podemos hacer nada porque están invadidas nuestras tierras", explicó.Los miembros de la comunidad decidieron hacer un recorrido llamado "Marcha por la dignidad y la conciencia wixárika" de más de 900 kilómetros hacia la capital del país porque argumentan que han solicitado audiencia con el jefe del Ejecutivo federal, pero no han obtenido respuesta hasta ahora.Ahora están en territorio del Estado de México, en el municipio de Ixtlahuaca, para pernoctar y luego seguir con su caravana hacia la capital mexiquense, posteriormente a la Ciudad de México, a la que pretenden arribar entre el 26 y 27 de mayo para plantarse en la plancha del Zócalo, frente a Palacio Nacional, a la espera de recibir audiencia del presidente Andrés Manuel López Obrador."El actual gobierno federal no solo auspicia la explotación rapaz de hidrocarburos o minera, también promueve grandes megaproyectos que están provocando el despojo de los territorios de nuestros pueblos en beneficio de los consorcios capitalistas, como el Tren Maya, el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, o el Proyecto Integral Morelos"."Seguramente es por eso que en el caso del pueblo wixárika el director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, extralimitando sus funciones y facultades, presionó por todos los medios a la comunidad wixárika de San Sebastián Teponahuaxtlán y su anexo Tuxpan para que desistiera de iniciar su larga marcha a la capital del país, manifestando que las demandas territoriales del pueblo wixárika iban a ser incluidas en un nebuloso "plan de justicia", ocurriendo que no puede hablarse de justicia a favor del pueblo wixárika sin solucionarse los despojos de tierras que ha sufrido a lo largo de la historia y que han sido auspiciados y administrados por el Estado Mexicano", es un extracto del comunicado que dieron a conocer antes de iniciar su caravana.
