Un oso negro subadulto hambriento que bajó de la Sierra de Zapalinamé en busca de comida asustó a algunos vecinos de las colonias Villas de Israel y La Herradura al oriente de Saltillo, de donde pidieron ayuda a la Policía Ambiental y Policía Municipal que, poco después, junto con personal de la Secretaría del Medio Ambiente (SMA) lo capturaron.Jorge Guerrero Salcedo, director de Recursos Naturales y Vida Silvestre de la Secretaría del Medio Ambiente (SMA) de Coahuila, dijo que el mamífero, que pesó 52 kilogramos, andaba merodeando y ya lo tenían monitoreado porque es la segunda vez que logran apresarlo."Otra vez bajó de las montañas siguiendo los rastros de basura y desperdicios de comida de los campistas en la zona de los asadores del Camino del Cuatro", comentó el funcionario.El reporte de la presencia del animal se recibió en el número telefónico 844 241 1000 de la Policía Ambiental y de inmediato al lugar acudieron oficiales en dos patrullas y otras tantas de la Municipal.Los elementos fueron cercando al mamífero para evitar que saliera huyendo, hasta que llegó personal de Vida Silvestre de la Secretaría del Medio Ambiente estatal, informó la presidencia de Saltillo en un comunicado de prensa."Fueron ellos quienes, con ayuda de un par de dardos tranquilizadores, pudieron dormir al animal para que los oficiales lo recuperaran sin poner en riesgo la vida del oso, de los oficiales y de los ciudadanos que se acercaron al área a la movilización".Después de revisarlo, el personal de la SMA constató el estado de salud del animal, macho adulto de unos 52 kilos de peso, y confirmó la hipótesis de que bajó a la zona urbana buscando comida para saciar su apetito.Guerrero Salcedo, refirió que la primera vez que lo capturaron lo reubicaron en su hábitat, pero volvió para comer los desperdicios que dejan turistas y paseantes que visitan la sierra.Pidió a la gente que cuando se encuentren con un oso o cualquier tipo de animales silvestres no los molesten porque luego quieren tomarse fotos o una "selfie" para presumir y pueden poner en riesgo su vida porque algunos son animales peligrosos y lo más prudente es que los dejen en paz."La principal recomendación es que cuando se tenga un encuentro con animales silvestres se llame de inmediato a las autoridades y lo dejen en paz" señaló Guerrero, "ya que en el afán de tomarle una fotografía, o una, ponen el riesgo su integridad física, en especial de los niños que, como en este caso, se acercaban al animal".En cumplimiento al protocolo el oso negro quedó en resguardado en la Secretaría del Medio Ambiente para regresarlo a la Sierra de Zapalinamé.Así el Gobierno Municipal de Saltillo, a través de la Policía Ambiental, refrenda su compromiso de mantener el equilibrio ecológico de nuestras zonas naturales, así como la vida de los especímenes silvestres que por diversos motivos se adentran en la zona urbana, puntualizó.OA
