El Presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó las críticas por su forma de sentarse en su reunión con su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, en el Despacho Oval de la Casa Blanca."No me desabroché el saco, no, pues se me iba a ver la panza", ironizó López Obrador.En conferencia de prensa "mañanera", en Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo dijo que se sintió en confianza durante el encuentro bilateral con el presidente Biden, por lo que se sentó cómodamente.Comentó que durante los saludos iniciales, le comentó al presidente Biden que se tardaría en su exposición de cinco puntos de cooperación entre ambos países."Con los medios y en la reunión bilateral, entonces la confianza para hablar de manera sincera con él, pues yo creo que por eso también me siento como me siento siempre, porque aunque he leído el manual de Carreño, uno debe ser auténtico, me sentía yo cómodo y abro un poco las piernas y las doblé porque yo estaba yo tranquilo, esto no es un asunto de urbanidad y de buenos modales", dijo.Desestimó las críticas de "los expertos" internacionalistas porque su encuentro con el presidente Biden no fue una visita de Estado."Ah, pero no es visita de Estado, luego un experto o experta, qué es una visita oficial, qué es una visita de Estado, qué es una visita de trabajo, toda esa formalidad casi monárquica los fascina y que no me desabroché el saco, no, pues se me iba a ver la panza, entonces, ‘miren la panza por la barbacoa y por tamales de chipilin, los chanchamitos, los tlacoyos, y la torta de chilaquil y la guajolota’".OA