La toma de autopistas en Jalisco representó pérdidas por 700 millones de pesos (MDP) al cierre del año pasado, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Concesionarios de Infraestructura Vial.Marco Antonio Frías, director general de la Asociación, explicó que Jalisco se ha convertido en un foco rojo para las empresas administradoras de autopistas, ya que desde diciembre pasado las casetas ubicadas en Jalostotitlán y Tepatitlán se mantienen ocupadas de manera intermitente.“Desde finales del año pasado, particularmente en Jalisco, se ha complicado el tema de la toma de casetas. Son grupos que rondan las 50 personas, generalmente violentos que suelen agredir a los usuarios y operadores”, dijo.Señaló que la toma de estas casetas representa un problema mayor por la importancia que tiene Jalisco en términos logísticos, ya que son vías de comunicación donde se transporta una cantidad importante de bienes de consumo y alimentos. “Esto también genera problemas en esas cadenas productivas del Estado”, añadió.Agregó que también hay una pérdida importante por concepto de recaudación de impuestos para el Gobierno.