Alejandro Lupercio Álvarez vive con diabetes desde hace 22 años. Hace 10, cuando regresó a El Salto, su padecimiento comenzó a agravarse, por lo que decidió hacerse más estudios.Ahora teme tener insuficiencia renal crónica por vivir cerca del río Santiago. Eso causó la muerte de su madre en 2021.“Parece ser que mis riñones ya comenzaron a fallar un poco. No sabemos si es por mi diabetes o porque en esta década que he estado aquí se adelantó más el proceso por estar cerca de la contaminación del río”, señaló.Alejandro Lupercio contó que cuando volvió a El Salto vio que el río en el que se bañaba cuando era niño ya no existía más. Al menos no como lo recordaba.“Me quedé sorprendido de la contaminación. Se ha notado más en la salud de las personas, sobre todo en los más jóvenes”, dijo.Compartió que cada vez hay más conocidos enfermos de cáncer, urticaria y problemas de la piel.“En el río hay una espuma que llamamos ‘radioactiva’ porque quema la piel al contacto. La contaminación es muy aguda aquí”, expresó.Y a ello se suma el problema de mosquitos, que a partir de las seis de la tarde se agudiza.Alejandro Lupercio exigió más clínicas para atender el problema de insuficiencia renal y estudios de cáncer, así como un ambiente sano para los niños.“Estamos cansados y molestos. Hay personas que pueden irse, hay quienes no. Tampoco hay mucha participación de la comunidad porque el miedo existe, los intereses son grandes”, finalizó.