El Centro de Justicia para las Mujeres (CJM) ubicado en Guadalajara atendió a 37 mil 138 personas entre mayo de 2015 y marzo de 2018, es decir, un promedio de 26 al día, informó la Fiscalía del Estado vía Transparencia.De esta cifra, 36 mil 505 mujeres viven en el Área Metropolitana. La mayoría en los municipios más poblados. Por ejemplo, 12 mil 75 mujeres son habitantes de Guadalajara y nueve mil 981 de Zapopan.Los grupos de edad a los que se brindaron el mayor número de atenciones fue al de 30 a 44 años, con un total de 16 mil 205, seguido por el de 18 a 29 años, con 13 mil 972.En 2015, las autoridades calcularon que el espacio tendría capacidad para brindar atención hasta un máximo de 80 mujeres al día, es decir, alrededor de 30 mil al año. Actualmente solo se recibe a una tercera parte. A pesar de ello las usuarias aseguran que tienen que esperar muchas horas para ser atendidas. Se solicitó entrevista con la Fiscalía General para hablar del tema, pero no hubo respuesta.Jaqueline Pérez, quien acudió a solicitar ayuda sobre la custodia de sus hijas, cuenta que la semana pasada tardaron más de 10 horas en atenderla.Relata que lleva un mes sin poder ver a sus hijas, pues su antigua pareja no la ha dejado entrar a su domicilio ni si quiera por sus documentos, lo que ha afectado el inicio de su proceso para pelear por la custodia.“Lo dejé por violencia y engaño, pero pareciera que es mejor aguantar todo, porque todo es muy lento. (Él tiene mis papeles) y tengo que volverlos a sacar, voy a tardar mucho”.Responde que desconoce si puede acudir a otras instancias para agilizar la situación. “De la Calle 14 me mandaron aquí, pero no me resuelven nada y estoy desesperada por tener a las niñas. Debo traer papeles, testigos, un dictamen psicológico. Me dijeron que puede tardar hasta un año”.Las usuarias señalaron que por la alta demanda de quienes acuden a pedir ayuda, principalmente por situaciones de violencia intrafamiliar, el personal del Centro de Justicia no se da abasto. Además de las horas de espera, señalan que los procesos son muy lentos en el organismo.La saturación que presenta actualmente el centro por la falta de trabajadores se observa también al exterior del inmueble, donde deben esperar los familiares de las usuarias.El Instituto de Información Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEG) reportó que en los primeros dos meses de este año se registraron un total de mil 371 casos de violencia intrafamiliar en todo el Estado, de acuerdo con datos provenientes de las averiguaciones previas y/o carpetas de investigación iniciadas en las agencias del Ministerio Público de la Fiscalía General.De esta cifra, Guadalajara fue el municipio con mayor incidencia de este delito, con 251 casos registrados. En segundo lugar se encuentra Zapopan con 208, seguido de Tlajomulco con 139, Puerto Vallarta con 128, y Tonalá con 117.“Al considerar la cantidad de viviendas en cada municipio, entre enero y febrero de 2019, Juchitlán tuvo la tasa de incidencia más alta con 25 casos por cada 10 mil viviendas, seguido de Acatic con una tasa de 15, Puerto Vallarta y Autlán de Navarro con 14 y Talpa de Allende con 11 casos”. Además, entre en enero y febrero de este año, el 64.8% de los delitos ocurrieron en la metrópoli.El modelo del Centro de Justicia para las Mujeres (CJM) surgió en 2013 como una estrategia nacional para brindar una atención integral y oportuna a mujeres víctimas de violencia, así como a sus hijos e hijas. El objetivo de su creación es garantizar su acceso a la justicia, para que puedan detener las situaciones que viven e iniciar un nuevo proyecto de vida.De acuerdo con el protocolo de Jalisco, la atención se divide en: urgencia inmediata y de primer contacto, básica general y especializada. La principal característica es que el trato debe ser expedito, empático, apegado a derecho, confidencial y gratuito. Además, el proceso se realizará ya sea por teléfono, presencial, canalización o visita domiciliaria. La guía metodológica de los CJM establece que uno de los principales factores de éxito tiene que ver con brindar una atención rápida y eficaz desde el primer instante.Se recomienda el “uso de la tecnología como herramienta de soporte para reducir el tiempo de espera y evitar la revictimización de las usuarias”. Otros aspectos importantes tienen que ver con la construcción de redes de colaboración, equipos multidisciplinarios, liderazgos, confianza, diferenciar las necesidades y oferta de servicios especializados.La adecuada identificación de los tipos y modalidades de violencia permite la detección oportuna de los casos, “con lo cual se posibilita, por una parte, detener procesos sociales de abuso de poder, reducir los riesgos en las víctimas y revertir daños, así como contribuir a la prevención de lesiones y secuelas mayores y/o irreversibles. A su vez, permite coadyuvar a la ruptura de la cadena de victimización por la que puedan atravesar las mujeres”, según el documento que rige a los CJM.CLAVESPsicológica. Cualquier acto u omisión que dañe la estabilidad psicológica, que puede consistir en: negligencia, abandono, descuido reiterado, celotipia, insultos, humillaciones, devaluación, marginación, indiferencia, infidelidad, comparaciones destructivas, rechazo, restricción a la autodeterminación y amenazas, las cuales conllevan a la víctima a la depresión, al aislamiento, a la devaluación de su autoestima e incluso a un intento de quitarse la vida.Física. Cualquier acto que inflige daño no accidental, usando la fuerza física o algún tipo de arma u objeto que pueda provocar o no lesiones ya sean internas, externas, o ambas.Patrimonial. Cualquier acto u omisión que afecta la supervivencia de la víctima. Se manifiesta en la transformación, sustracción, destrucción, retención o distracción de objetos, documentos personales, bienes y valores, derechos patrimoniales o recursos económicos destinados a satisfacer sus necesidades y puede abarcar los daños a los bienes comunes o propios de la víctima.Económica. Toda acción u omisión del agresor que afecta la supervivencia económica de la víctima. Se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus percepciones económicas, así como la percepción de un salario menor por igual trabajo.Sexual. Cualquier acto que degrada o daña el cuerpo y/o la sexualidad de la víctima y que por tanto atenta contra su libertad, dignidad e integridad física. Es una expresión de abuso de poder sobre la mujer.Aunque su pareja la había amenazado, celado y chantajeado, Alejandrina guardaba silencio, pues pensaba que la gente la iba a considerar loca o exagerada. Relata que el hombre, incluso, subió fotografías íntimas de ella en redes sociales. Sin embargo, fue hasta que la “levantaron”, que decidió emprender acciones.“Me daba miedo decir algo porque sentía que la gente no me iba a creer. Hasta que unos hombres me subieron a un coche y me tiraron en Periférico para asustarme. Él los mandó a amenazarme. Entonces decidí levantar una demanda porque no quería morir”, destaca.La joven cuenta que acudió al entonces Instituto Jalisciense de las Mujeres (IJM), donde le brindaron asesoría y seguimiento a su caso. Pese a ello, aún temía por su integridad, por lo que preguntó por algún refugio. Afirma que en ese entonces estaba esperando a un hijo, y el embarazo era de alto riesgo.“Me dijeron que mejor les dejara cuatro contactos de confianza. Me estuvieron llamando cada mes para ver cómo estaba, la verdad eran muy amables conmigo pero mi ex novio seguía buscándome en todos lados: trabajo, casa, escuela. Me llegó a amenazar de muerte”.Dice que afortunadamente el hombre se mudó a la Ciudad de México a cursar una maestría, por lo que dejó de acosarla físicamente. “Se enteró que lo demandé y mejor se alejó, pero nunca le hicieron nada. Eso fue hace un año y a veces todavía me manda mensajes en redes sociales, desde cuentas que no conozco. Ahora sé que ya los pueden meter a la cárcel por difundir tus imágenes sin tu permiso. Lo que puedo decir ahora es que las mujeres pidan ayuda cuando estén dentro de relaciones tóxicas”.En los últimos seis años, 279 mujeres han sido alojadas en el Centro de Atención a las Mujeres, sus Hijos e Hijas “Estancia Temporal”, que depende del Sistema DIF Jalisco. El organismo informó vía Transparencia que, de 2013 al 13 de marzo de 2019, han ingresado acompañadas por 540 menores.La cifra es baja si se toma en cuenta que el llamado Camhhet puede albergar a 24 mujeres de manera simultánea, con o sin hijos, según reportó el DIF Jalisco. Pese a ello, responden que en ese periodo no tiene registros de casos en los que se hubiera negado alojamiento a alguna de las usuarias.El Camhhet indica que han brindado 26 mil 307 atenciones y gestiones de trabajo social, aunque la cifra ha disminuido. Mientras en 2013 otorgaron nueve mil 233 servicios, el año pasado la cifra fue de tres mil 061 atenciones. Las principales acciones realizadas fueron entrega de ropa, productos de higiene y calzado.TESTIMONIOS“Necesitamos abogados que defiendan de verdad”“Ojalá que el Gobierno ponga remedio. Necesitamos buenos abogados que de verdad defiendan a las mujeres, porque actúan hasta que nos matan, o a veces ni así”, sostiene Karla Álvarez, otra usuaria del Centro de Justicia.Cuenta que acude al lugar desde agosto de 2018, cuando su anterior pareja la intentó asesinar. Dice que desde entonces nada se ha resuelto.“Me traen vueltas y vueltas y vueltas. Fue intento de homicidio, me vio en la parada del camión y me aventó el carro. Es taxista. Tengo dos demandas, una por intento de homicidio y otra por custodia, pero nada avanza”.La mujer dice que en el proceso le piden muchos papeles y ha tenido que acudir a otras instancias para conseguirlos. “La verdad uno pierde mucho tiempo, gastas en camiones, todo es muy tardado. Ahora hasta me quieren quitar a mis hijos para darle la custodia a los abuelos paternos”.Le ayudan con terapia, pero teme por su integridadMargarita dice que llora cada que asiste a terapia al Centro. Los ojos rojos la delatan. Camina con las manos entrelazadas porque al salir se siente esperanzada, aunque la sensación le dura solamente unos momentos.“Aquí en el Centro me ayudan a sacar mis sentimientos. Mi pareja me amenaza, no me deja tranquila. Pasan ocho, 15 días y de nuevo vuelve. Aunque yo venga aquí y me empodere, él me empieza a amenazar. Sus chantajes emocionales son los que me hacen caer”, lamenta.Sin embargo, la mujer considera que es buena la atención psicológica que le brindan. Además, quiere pedir de nuevo una orden de alejamiento, “pero luego me desanimo porque muchas usuarias me han dicho que luego no proceden”.La diputada local Sofía García Mosqueda, presidenta de la Comisión de Igualdad Sustantiva y de Género del Congreso de Jalisco, remarca que las fallas en la atención del CJM provocan un sufrimiento añadido a las afectadas, pese a ser una institución que debería mejorar su situación.“Todavía que vivieron y sufrieron violencia… tenerlas en espera es una revictimización. Hay que mejorar los procesos, las mujeres están teniendo la valentía de demandar y todavía tienen que estar esperando más de ocho horas”.Remarca que por esta problemática enviaron un acuerdo legislativo al Gobierno del Estado, en donde se recomienda fortalecer la operación del Centro de Justicia, ya que no se ha logrado reducir la violencia contra este sector de la población.LA VOZ DEL EXPERTOFrancisco Jiménez Reynoso (doctor en derecho de la Universidad de Guadalajara)Si las mujeres reciben una atención deficiente, en el futuro preferirán no denunciar los abusos que padecen, considera el académico. Expresa que se debe hacer un mapa para detectar los lugares con mayor incidencia de violencia, para acercar la atención.“Se deben multiplicar los esfuerzos. Se corre el riesgo de seguir con la famosa cifra negra que no entra a las estadísticas, y de esa forma no conocemos la magnitud del problema”.Recuerda que en Jalisco ha incrementado la violencia en sus modalidades emocional, económica y sexual. Eso provoca trastornos psicológicos y de salud para quienes la padecen. “Se generan problemas nerviosos, angustias, miedo, depresión, insomnio. En casos graves las mujeres llegan a atentar contra su vida”.Acepta que si bien es cierto que sigue creciendo la impunidad en el Estado, en este tema se deben implementar acciones integrales. “En casos graves debe haber sanciones ejemplares. No necesariamente en todos los casos habría cárcel, pero sí mejorar la atención para la mujer y para el violento”.Sigue: #DebateInformador¿Ha tenido problemas para ser atendida en el Centro de Justicia para las Mujeres?Participa en Twitter en el debate del día @informador