Pese a la situación actual que se vive en el mundo por el coronavirus, Jorge tuvo que regresar a México desde Australia. El joven de 19 años llegó a Guadalajara el sábado pasado después de 32 horas de estar entre vuelos y aeropuertos. Explica que de los cuatro aeropuertos en los que estuvo por conexión: Sidney, Honolulu, Los Ángeles y Guadalajara, sólo en este último había un módulo de salud donde le aplicaron un test sanitario.Señala que al arribar al Aeropuerto Internacional de Guadalajara le solicitaron sus datos, le midieron la temperatura corporal, le hicieron algunas preguntas sobre su estado de salud, que incluían si registró tos o falta de aire, dolor muscular, fiebre. Además le brindaron recomendaciones para evitar la propagación del coronavirus."Cuando llegué al aeropuerto de Sidney la gente andaba normal y nada más había pequeños módulos de gel antibacterial. En Honolulu sólo me preguntaron si había viajado en los últimos 14 días y en Los Ángeles eran más las personas que andaban con cubrebocas y tomando distancia personal", narró.Jorge apunta que antes de irse de Sidney, la gente llevaba su vida común y todavía no había entrado en vigor las medidas de distanciamiento social para combatir el virus. El número de casos confirmados de COVID-19 en Australia era de mil 098 hasta esta mañana, un incremento de más de 200 con respecto a los 874 del sábado.A pesar que hasta ahora no ha presentado ningún síntoma, Jorge se puso en cuarentena en su domicilio y así llevar con el protocolo para no arriesgar a ningún miembro de su familia ni a alguien externo.JB