El reciente asesinato de la abogada, Verónica Guerrero el 3 de febrero de este año se descarta que hubiera sido por activismo ecológico por su lucha de evitar que se tirará basura en algunos terrenos en Matatlán, al menos la Fiscalía del Estado de Jalisco descartó ese móvil y presume que se debe a unas propiedades de departamentos en las inmediaciones de Urbi Quinta.Guerrero participaba en el colectivo vecinal de Urbi Quinta que buscaba que la empresa encargada de la recolección de basura ya no llevará residuos sanitarios a Matatlán tras la saturación del basurero de Los Laureles en Tonalá a finales del 2021.Por su parte, el fiscal del Estado de Jalisco, Luis Joaquín Méndez, consideró que la causa de su asesinato no fue por una protección ambiental, sino más bien por intereses inmobiliarios.“En repetidas ocasiones nos han estado preguntando del tema, esta investigación sigue abierta, se sigue trabajando todavía el día de ayer el área me informaba que están realizando algunos actos de investigación ya en su momento les dijimos de lo que tenemos en la carpeta descarta totalmente un tema de activismo de que se estuvieran defendiendo este tipo de derechos, lo que tenemos en la carpeta y la línea que seguimos es precisamente la actividad que tenía la abogada y la relación que tiene con algunos temas de fincas o viviendas al interior del fraccionamiento”, comentó el funcionario.El colectivo vecinal de Urbi Quinta había hecho manifestaciones en diciembre y a principios de este año, integrantes por su parte aseguraron que recibieron amenazas, intimidaciones y agresiones.“Los denunciaron desde diciembre y las autoridades no hicieron nada. Denunciaron de las amenazas y no actuaron”, destacó el Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC).MF
