El Instituto Jalisciense de Dermatología, perteneciente a la Secretaría de Salud del Estado, ha innovado para poder analizar afecciones capilares; los Fotofinder son instrumentos especializados de alta tecnología para analizar manchas y lunares de la piel a fin de prevenir melanomas. Ricardo Quiñones, director del instituto, explicó que esto es gracias a la amplitud de hasta 30 aumentos que brindan las imágenes, lo que permite observar la piel a una profundidad de 1.5 milímetros mediante luces y filtros especiales, y gracias a lo cual la imagen se puede acercar a la raíz del cabello. “La finalidad de este equipo, que forma parte de la Clínica de Tricología, es detectar en etapas tempranas la aparición de enfermedades de cabello y de piel en general, a fin de establecer a tiempo un tratamiento y evitar complicaciones”, destacó el director. De acuerdo con Quiñones Venegas, sólo se cuenta con un aparato similar en tres hospitales privados, por lo que se trata de un gran avance para la atención de la salud pública que se ofrece desde el Dermatológico a los jaliscienses. En promedio la Clínica de Tricología puede atender de 10 a 15 pacientes con afecciones en el cabello diariamente en caso de ser necesario, sin embargo, explicó el director, no todos los casos que llegan a las especialistas requieren pasar a Tricología, pues sólo se abordan afecciones graves. Porque en ocasiones lo que aparentemente parece un lunar puede no serlo, sino la señal de que la piel está en peligro de presentar cáncer, es necesario acudir a atención dermatológica para descartar cualquier riesgo. Por ello y con el objetivo de brindar una atención especializada y de mejor calidad, el Instituto Jalisciense de Dermatología, el cual forma parte del Sistema de Salud Estatal (SSJ), ha adquirido un Fotofinder, equipo especializado para analizar en un menor tiempo la situación de los pacientes quienes requieren un diagnóstico preciso. En palabras del director del Instituto, Ricardo Quiñones, es el instrumento con el cual los dermatólogos pueden observar, a niveles de hasta 1.5 milímetros sobre la piel, y con una ampliación nítida de hasta 30 aumentos, la situación de las manchas que puedan presentarse, aunque en ocasión parezcan inofensivas. Aunque existen Fotofinders de mano, la SSJ realizó la compra por más de un millón de pesos de este equipo de alta especialidad con el que se impulsa a la clínica de Tricología, ubicada dentro del Dermatológico, y con el cual se ha logrado disminuir el tiempo de análisis de los lunares presentados en una persona de 45 a sólo un minuto, lo cual permite eficientar la atención con el resto de los pacientes. “El proceso ya se ha digitalizado. Un paciente con más de 40 lunares, que son los que tiene un paciente promedio, nos llevaba en promedio 45 minutos en captar y analizar las imágenes. Con este equipo se puede hacer en un minuto, incluso si el paciente pudiera tener el doble de lunares, y, además, el mismo equipo señala cuáles podrían ser los lunares atípicos para su seguimiento”, explicó Quiñones. Dijo, además, que el equipo permite agilizar tiempos debido a que las imágenes se descargan de manera automática en las carpetas de cada paciente, a comparación de otros equipos, en los que se lleva a cabo de manera manual, imagen por imagen. Por ello, si alguna persona observa que tiene algún lunar que apareció en los últimos meses y se ha desarrollado de manera anormal, o incluso, tiene mucho tiempo con él, pero ha cambiado de forma, es asimétrico, tiene bordes irregulares, dos o más colores, y evoluciona al paso de los meses, puede acudir a las instalaciones del Instituto Dermatológico del Estado para realizar los análisis necesarios. En caso de que el médico determine si existe algún riesgo de que el lunar sea maligno o pueda convertirse en un melanoma, entonces podría ser derivado a la clínica de Tricología, a fin de hacer una revisión más profunda y dar el seguimiento adecuado por el bienestar del paciente. Una práctica que suele ser utilizada por las mujeres y por los hombres que gustan del cabello largo, es mantener su cabello sujeto y tensado con una liga, utilizando además distintos productos como gel, cera o spray para evitar que los cabellos pequeños salgan de su lugar. Algunas, incluso, lo hacen con el cabello húmedo. Sin embargo, para el director del Instituto Jalisciense de Dermatología, Ricardo Quiñones, este tipo de peinados podría poner en riesgo el cabello de las personas que ponen en práctica de manera habitual la llamada “cola de caballo o coletas”, debido a que podrían producir una “alopecia por tracción”, aunado al daño que los químicos podrían producir al cuero cabelludo. Por ello, dijo, tanto en menores como en adultos con cabello largo, es recomendable evitar este tipo de peinados diariamente, y se opte por peinados que no requieran tanta tensión del cabello o productos químicos. CT