Hoy es Sábado de Gloria, plena Semana Santa, y Puerto Vallarta está llena de paseantes. Y cuando se trata de Puerto Vallarta, las opciones de recreación son múltiples: existe una amplia oferta de atracciones para quienes gozan de un presupuesto holgado, pero también para aquellos que tiene restricciones presupuestarias. Playas, paisajes, ríos, selva y, en general, las bellezas naturales que ofrece el destino turístico de Jalisco siempre serán extraordinarias opciones totalmente gratuitas para que los visitantes pasen momentos inolvidables y con un costo mínimo. Y sí, dentro de estas opciones, se encuentra la observación con cocodrilos, en su hábitat, completamente libres y sin costo alguno para los paseantes. Más allá de los avistamientos fortuitos de cocodrilos que suceden en Puerto Vallarta, sobre todo en tiempo de lluvias. Existe un lugar donde puedes observarlos la mayor parte del año, en su medio ambiente, y aquí te contamos.Para hacerlo, debes emprender el camino para la playa conocida como Boca de Tomates. Si vienes de Nuevo Vallarta rumbo a Puerto Vallarta, la entrada al sitio se encuentra justo después de pasar el Río Ameca, límite natural entre Nayarit y Jalisco, en la primera curva. Ahí verás una pequeña plaza comercial, cuando pases junto a un Starbucks, deberías tomar la lateral y salir a la derecha, donde se encuentra un banco Santander; hay que hacerlo con precaución, para de nueva cuenta girar a la derecha, al cerrar con una escuela, y seguir derecho por un camino de terracería paralelo a la autopista del aeropuerto aproximadamente un kilómetro y medio, hasta una nueva curva donde se encuentra el lugar para avisar a los cocodrilos.Pero si vienes del centro de Puerto Vallarta, deberás tomar el camino hacia Nuevo Vallarta, por el Blvd. Francisco Medina Ascencio, hasta que pases el aeropuerto y buscarás la salida luego de rodear la terminal aérea, justo en la misma plaza donde está el Starbucks; ahí, justo en una calle detrás de la cafetería, tendrás que proceder a cruzar el otro sentido de la calle con precaución por el flujo vehicular es fuerte e incorporarte inmediatamente a la lateral derecha hasta el Santander para repetir el camino de la primera opción.Cuando llegues al sitio, te podrás dar cuenta fácilmente porque los avisos de zona de cocodrilos te harán reconocerlo. En el área no hay un lugar de estacionamiento, por lo que puedes estacionarte en la calle sin problema, el tránsito es muy leve. Una malla ciclónica divide el lugar donde habitan los cocodrilos del camino, pero puedes verlos con facilidad en su medio. El espectáculo es sorprendente. Es importante no alimentarlos y tampoco causarles molestia. Son varias las personas que detienen su camino, antes de llegar a la playa Boca de Tomates, para observar los reptiles, por lo que extrema precauciones con el paso de vehículos, porque algunas personas no se bajan de ellos para observarlos.No necesitarás absolutamente nada para contemplar a esta magnífica especie, ni tiene un costo; únicamente se te pide tener precaución y mantener algunas medidas que incluyen el no cazar, no alimentar a los animales, no arrojarles objetos, mantener tu distancia y no ingresar a su hábitat. Será un avistamiento que disfrutarás mucho. Luego de hacerlo, si lo deseas, puedes continuar el camino a la playa.OA