Los Ayuntamientos de Guadalajara y Zapopan afirman que no tolerarán nuevos puestos de comerciantes ambulantes afuera de las estaciones de la Línea 3 (L3) del Tren Ligero. Actualmente hay 58 permisos en zonas cercanas. No planean otorgar más.La nueva ruta en la metrópoli tiene 18 estaciones: cuatro están en Zapopan, 10 en Guadalajara, una entre los límites de estos municipios y tres en Tlaquepaque.Blanca Valdez, directora de Tianguis y Comercios en Espacios Abiertos de Guadalajara, comenta que la estrategia es controlar el ambulantaje.Destaca que en la Perla tapatía hay 42 autorizaciones en los alrededores de la Línea 3, principalmente en las paradas de Río Nilo, La Normal, Ávila Camacho y Plaza Patria (esta última es en la zona limítrofe con Zapopan). “Donde tenemos más concentración de permisos es en Río Nilo, cerca de la Clínica 14 (del Instituto Mexicano del Seguro Social)... venían funcionando antes de que se pensara la estación en ese punto. Se planea que sigan allí, pero con el ánimo de no incrementar”.Jaime Hafid Cerda, director de Tianguis y Comercios en Espacios Abiertos de Zapopan, comparte que hay 16 autorizaciones afuera de las paradas en Arcos, Mercado del Mar y Plaza Patria. En Periférico Belenes y Zapopan Centro no hay.“Nos hemos dado a la tarea de mantener libres las plazoletas, las explanadas y todos los espacios que hay relacionados con las estaciones. No hemos autorizado permisos nuevos… y no vamos a autorizar más”.Blanca Valdez explica que los comercios afuera de las estaciones de El Santuario y Centro, que forman parte del Paseo Alcalde, son regulados por la Comisión Dictaminadora que avala los permisos en el primer cuadro. En este polígono, que va desde El Santuario hasta el Hospicio Cabañas, hay 87 para puestos semifijos, móviles e itinerantes.Para conocer qué pasará afuera de las tres estaciones ubicadas en Tlaquepaque se pidió entrevista con el Ayuntamiento. No respondió.De las 10 estaciones del Tren Ligero ubicadas en Guadalajara y una en el límite municipal con Zapopan, las que tienen más comercio ambulante están en las zonas de La Normal y Río Nilo, confirma Blanca Valdez, directora de Tianguis y Comercios en Espacios Abiertos del Ayuntamiento tapatío.“En la Normal están en la calle Magisterio y Guanajuato, no a la salida de la estación, pero sí en alrededores. Incluso, en Avenida de los Maestros, afuera del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, se les hicieron locales para dar una mejor imagen”.Indica que en Ávila Camacho han otorgado permisos para espacios fijos, en la calle donde estaba un banco. Dice que la mayoría de los giros es de comida, como tacos y hamburguesas; también hay una cerrajería. Detalla que los comerciantes que están al lado de la Catedral son autorizados por la Comisión Dictaminadora del Centro Histórico. Sobre el Paseo Alcalde, indica que también esa comisión es la que analiza cualquier problemática o solicitud que se presente. “Es una comisión especial donde participan los regidores de todas las fracciones políticas y las diversas direcciones, como las de Inspección y Vigilancia, Promoción Económica… y se analiza cada tema en específico”.Para esta zona hay acuerdos para que trabajen 87 comerciantes, ubicados en espacios como el Hospicio Cabañas, el andador de la Plaza Tapatía, alrededor de la Cruz de Plazas en el Centro y El Santuario.El Artículo 110 del Reglamento para el Funcionamiento de Giros Comerciales, Industriales y de Prestación de Servicios de Guadalajara establece la delimitación de la Zona de Intervención Especial del Centro Histórico, que principalmente inicia en la calle Juan Álvarez y sigue por Liceo. Atraviesa las calles San Felipe, Venustiano Carranza, Independencia, General Salazar, Ignacio Allende, Dionisio Rodríguez, Cabañas, Álvaro Obregón, López Cotilla, Maestranza, Madero, Ramón Corona, La Paz, Colón, Juárez, Donato Guerra, Madero, 8 de Julio, López Cotilla, Pavo, Pedro Moreno, Mariano Bárcena, San Felipe, Contreras Medellín, Reforma y Pedro Loza.Se permitirá la instalación del comercio semifijo, móvil o itinerante, siempre y cuando se cumpla con los lineamientos previstos y se comercialicen los productos como las flores, las verduras cocidas, la fruta picada, las nieves, las bebidas preparadas sin alcohol, las artesanías, repostería, golosinas y dulces típicos, prestación del servicio de limpieza de calzado y venta de periódicos, entre otros.Queda prohibida la comercialización de los productos manufacturados de importación.Jaime Hafid Cerda, director de Tianguis y Comercio en Espacios Abiertos de Zapopan, comenta que el objetivo es que las estaciones del Tren Ligero se mantengan libres del comercio ambulante.Remarca que desde hace tiempo están bloqueados los permisos para afuera de las estaciones, además de que no habrá nuevas autorizaciones.“Es una realidad que habrá muchas personas que quizá aprovechando la afluencia de las personas probarán suerte, por así decirlo… pero vamos a tener supervisión permanente para efecto de invitar a la gente a que se retire… y si se va a regularizar en otras zonas de la ciudad”.En ese sentido, informa que las personas que quieran vender pueden acercarse a las oficinas de Espacios Abiertos, para que puedan estar en los lugares adecuados. Subraya que no se trata de crecer el comercio en la calle, pero sí darle oportunidad a la gente. “Aquí en Zapopan siempre hemos dado la oportunidad a la gente de trabajar, lo que queremos es promover una oportunidad para ellos… pero hay que respetar a la ciudad, los espacios abiertos, los espacios para lo que son hechos”.Remarca que en la estación de Arcos de Zapopan hay 11 permisos en calles aledañas; en Mercado del Mar hay tres, mientras en Plaza Patria sólo dos. Y en las paradas de Belenes y Zapopan Centro no hay autorizaciones para este comercio porque las zonas están bloqueadas.Explica que, por ejemplo, en Plaza Patria se ha trabajado con los comerciantes desde hace meses para liberar los espacios; incluso, por el tema de la instalación de la ciclovía. Y en Arcos del Triunfo ya fueron autorizados desde hace mucho tiempo.“Ya los movimos en su momento, pero vamos a valorar la funcionalidad y la operación. Si no estorban o generan algún bloqueo, por el cúmulo de personas, quizá reubicarlos o cambiarlos de zona”.El último Análisis Costo-Beneficio sobre la Línea 3, realizado en 2019, describe que la velocidad promedio para el tránsito vehicular en el corredor entre Zapopan, Guadalajara y Tlaquepaque se encuentra entre 10 y 28 kilómetros por hora, que representan entre 16% y 47% de la velocidad del diseño de estas vialidades.Y si continuaban sin el tren, en 15 años la velocidad para el transporte público en este corredor pasaría de 16 kilómetros por hora a 12, lo que implicará un incremento significativo de los tiempos de traslados de los usuarios del transporte público.Sin embargo, el análisis arrojó que tras la puesta en operación de la Línea 3 y el reordenamiento del transporte público, los vehículos privados recibirán una mejora de 14.4% en su velocidad, lo que se ve reflejado en menores tiempos de recorrido.En el caso de los peatones, se calculó que un viaje promedio por usuario del transporte público en el año 2018 duraba 75.46 minutos, para las 15 mil 864 personas que viajan en la hora pico de la mañana. Mientras que, con el tren, el tiempo se reduce a 59.46 minutos, de los cuales 38.18 minutos corresponden al tiempo del viaje a bordo, 11.17 minutos de tiempo en espera y 10.09 minutos de caminata.Se tomó en cuenta el circuito del corredor de las Avenidas Los Laureles, Manuel Ávila Camacho, Alcalde, Revolución y Silva Romero, que tienen una longitud de 21.9 kilómetros.Arcos de ZapopanBelenesZapopan CentroPlaza PatriaLa NormalEl Santuario y Guadalajara CentroCon el comienzo de la Línea 3, ocho rutas de camiones cambiaron sus derroteros, llegando sólo hasta la estación del Centro de Transferencia Multimodal en La Normal. Esta desviación ocasionó que usuarios cambiaran también la forma de moverse, pues quienes iban de las zonas de Las Villas, Las Mesas o Los Molinos hacia el Centro de Guadalajara ahora deben pagar dos pasajes.Lo anterior, debido a que la mayoría de las rutas llegaba hasta el Centro de Guadalajara; sin embargo, los usuarios deben bajarse y continuar su traslado en los vagones de la Línea 3 en La Normal.Tras un sondeo, pasajeros destacaron que “vale la pena” gracias al ahorro de tiempo que la conexión les dará; además, la mayoría se siente más segura.Nayeli, por ejemplo, vive en la Colonia Villas de Guadalupe. Para ir al Centro de Guadalajara a surtir los artículos de su negocio tomó la Ruta C-04 y descendió de ésta para tomar después la Línea 3. Destaca que, con este viaje, ahorró 40 minutos en su trayecto.Aurora, por su parte, descendió de la Línea 3 acompañada de sus dos hijas, para tomar la Ruta 231-C. Para ella será complicado ir al Centro de la ciudad acompañada, por lo que espera que la Secretaría de Transporte pueda considerar un descuento para quienes trasbordan estas rutas a la Línea 3.Por otra parte, están los usuarios a los que el recorte de la ruta afectó sus traslados, como María Eugenia, una mujer que acude a revisión al Hospital Civil y quien también tomaba la Ruta 231-C. Ahora debe bajar en La Normal y caminar 10 cuadras hasta la institución médica.“Antes, al Ruta 231 me dejaba casi en la esquina del hospital, pero ahora tengo que caminar 10 cuadras”. ContactoSigue #DebateInformador y participa en Twitter en el debate del día @informador¿Qué opina de la operación de la nueva ruta del Tren Ligero?JL