Con los sillones arriba de las sillas y los refrigeradores sobre tarimas, María de Jesús Santiago Flores, vecina de la calle Armillita, en la Colonia El Dean, fue una de las que más daños sufrió con la inundación registrada el jueves.Aunque fueron 76 las fincas que anegó la tormenta, sólo en 40 hubo afectaciones a las pertenencias de sus habitantes. A esos moradores se les pagará lo que se les arruinó. Así lo afirmó el presidente municipal interino de Guadalajara, Enrique Ibarra Pedroza.El mismo jueves, personal del Ayuntamiento acudió a la zona para verificar los daños.El alcalde tapatío aseguró que ya se levantó el inventario. La calle Armillita fue donde más casas se inundaron, pese a que está a una cuadra de distancia del parque El Dean.Durante la lluvia, el agua entró a las casas aunque el vaso regulador, cuya capacidad fue ampliada el año pasado, ni siquiera se llenó. Según los habitantes, la diferencia está en las obras de reposición de redes hidrosanitarias y pavimentación, pues éstas aún no se concluyen.Jorge Gastón González, director de Obras Públicas, admitió que los inmuebles de esa zona “se volverán a inundar”, por lo que las autoridades implementaron un protocolo de prevención con un módulo de atención, mientras se encuentra una solución al problema.“La solución es con lo que comenzamos: limpiando primero, contactando a los vecinos”.Las áreas de Protección Civil, Servicios Públicos, Sindicatura, DIF, Secretaría General y Desarrollo Económico permanecerán en la zona.
