Hace casi dos meses la Sala de Situación por COVID-19 de la Universidad de Guadalajara (UdeG) proyectaba llegar al pico de la pandemia de COVID-19 -con 88 mil 432 casos- este 14 de septiembre.Y, pese a que hoy los casos son menores -59 mil 943 hasta el corte del 13 de septiembre-, además que hay una estabilización en los nuevos casos con entre cuatro mil y cinco mil semanales, así como en las muertes, Jorge Hernández, miembro de la Sala, llamó a la población a no bajar la guardia.“No significa que alcanzando el pico vamos inmediatamente hacia abajo, sino que el tiempo que se mantendrá constante -mínimo tres semanas- será decisivo para que no se baje la guardia, lleguemos a un momento de inflexión y que la curva, ahora sí, vaya en descenso”, detalló.Agregó que, aunque el Estado sigue en números rojos, los contagios no se han disparado a lo que se tenía pronosticado: “Es una buena noticia llegar al pico porque significa que llegamos a una primera etapa del problema y una estabilización”. Señaló que hay dos razones por las que pudo suceder esta baja de contagios.Una de ellas, la optimista, es que a partir del 15 de agosto comenzó una desaceleración en el ritmo de nuevos casos por semana y ha habido cierta estabilidad. Se han mantenido en alrededor de cuatro mil 800 y no se ha detectado un aumento como el que se podría esperar.“Este cierto freno podría ser la diferencia de casi 30 mil casos menos de los proyectados con base en estimaciones”, dijo.Pero la segunda razón, la realista, es que la diferencia pudiera deberse a los casos asintomáticos. Del 100% que contrae la enfermedad, cerca de 30% no presenta síntomas, por lo que no se contabilizan porque ni siquiera acudieron a realizarse la prueba.“Estas semanas son críticas, porque así como nos pudieran llevar hacia abajo nos pueden llevar hacia arriba y de manera muy pronunciada. Es el momento en el que más debemos reforzar las medidas de cuidado para que no se nos vaya a disparar y que haber llegado a este momento haya valido la pena”, reiteró Hernández.Resaltó que, a partir de hoy, la Universidad monitoreará con mayor fuerza el comportamiento del pico para saber si va a la baja o, en algún momento, advertir sobre algún posible brote si es que no se tomaron las medidas pertinentes.“Para decir que vamos a la baja tenemos que observar diferentes elementos: que el número de casos recuperados sea mayor, que los nuevos bajen y que la cantidad de muertes también siga bajando”, dijo.IM