Luego de reunirse por separado con el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) para abordar el tema de la construcción de la Presa El Zapotillo, los gobernadores de Jalisco y Guanajuato y los habitantes de Temacapulín, Acasico y Palmarejo, quienes se oponen a la obra, coincidieron en que durante los encuentros se dieron los primeros pasos para alcanzar una solución.Tras salir de Palacio Nacional, Enrique Alfaro afirmó que el Mandatario se pronunció en contra de una posible demolición o desmantelamiento de la obra.“No se decidió el día de hoy (la altura de la cortina). Quedó claro que no es una obra que hicimos nosotros, pero que ya está allí y que es totalmente inviable, absurdo, el pensar en demolerla. Eso es una buena noticia y a partir de eso vamos a seguir con la mesa abierta para escuchar las distintas voces y llegar a una conclusión en los próximos días”, dijo.Por su parte, Diego Sinhue Rodríguez, mandatario de Guanajuato, comentó que presentaron a López Obrador la propuesta técnica del convenio alcanzado entre ambas entidades y la Comisión Nacional del Agua (Conagua).El pacto especifica que Jalisco recibirá 76% de las aguas de la cuenca del Río Verde y Guanajuato el resto.Gabriel Espinoza Íñiguez, vocero del Comité Salvemos Temacapulín, Acasico y Palmarejo, señaló que se mantendrán en la lucha para que sus pueblos no se inunden. Acentuó que las dependencias correspondientes tendrán que buscar alternativas para una gestión integral del agua.“No necesariamente (se tendría que dinamitar lo construido); habría que buscar alternativas. Nuestra propuesta es fin a la corrupción, gestión integral del agua y respeto a los derechos humanos de los pueblos”, indicó.El activista agregó que el tabasqueño les confirmó que no habrá más presupuesto para la presa en 2020 y que pidió a Alfaro y a Sinhue Rodríguez que trabajen en otras alternativas con pueblos, productores y ciudadanos.
