Gustavo vive en una casa a un costado del terreno de El Hoyanco desde hace siete años. Cuenta que en 2014 era común ver camiones cargados de escombro. Sin embargo, transcurrió el tiempo y esto dejó de ser recurrente.“Nos dijeron que aquí iban a hacer un parque muy grande, pero sólo quedó en eso, porque nunca más se volvió a escuchar el tema. Estaría bueno que sí lo hicieran porque hay muchos niños que podrían venir a jugar”, comenta el habitante.Jorge, también vecino, dice que cuando comenzaron a llegar los vehículos con material, las personas acudían a rescatar acero o cobre.Destaca que durante los primeros meses su ganancia podía llegar hasta los cuatro mil pesos diarios, pero al final ya no hubo nada que recolectar.A pesar de que se llevaron al punto alrededor de dos mil millones de toneladas de escombro, no fue rellenado en su totalidad y actualmente es un terreno donde las personas tiran basura, ladrillos o mosaicos.Durante un recorrido por el predio, de 10 hectáreas de longitud, se constató que hay bultos de ropa, llantas, autopartes dañadas, juguetes, electrónicos descompuestos y hasta animales muertos.Hasta ahora no hay un proyecto de continuidad del parque y las dependencias involucradas en la pasada administración estatal hoy desconocen su injerencia.La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) informó que ya se terminó de llevar material con el que se rellenaba El Hoyanco. No se sabe cuál será el siguiente paso o quién será el encargado del mismo.Por su parte, el Sistema de Tren Eléctrico Urbano (Siteur), dependencia a cargo del seguimiento de avance del relleno del predio, y que tenía en planes la colocación de la vegetación y el arbolado, indicó que apenas “se está revisando el tema”.Añadió que la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP) podría tener mayor información al respecto. Ésta última se deslindó del proyecto.