Ana Gómez usa su tarjeta de prepago para sus cuatro pasajes al día en el transporte público, principalmente para ir a su trabajo. Con ello ahorra dinero porque se evita perder los 50 centavos por pagar con monedas de 10 pesos en las máquinas de los camiones o del Tren Ligero. “Tomo cuatro camiones y voy a trabajar de lunes a sábado. A veces salgo a mandados o de paseo. Son como 10 o 15 pesos que me ahorro por semana gracias a la tarjeta. No pago con monedas para que no me roben dinero”.Con el pago con la tarjeta, Édgar Suárez acentúa que evita las filas cuando ingresa al Tren Ligero en la Estación Auditorio de la Línea 1, por lo que no pierde tanto tiempo. “Aquí en las mañanas se hacen filas enormes para entrar al Tren si quieres pagar en efectivo. Y cuando veo que me queda poco saldo, recargo la tarjeta en tiendas de conveniencia o en el teléfono”.Desde que comenzó a implementarse el sistema de pago electrónico o prepago en el transporte público en Jalisco en 2018, cada vez más usuarios pagan sus pasajes con tarjeta. Amílcar López Zepeda, director de Transporte Público, reconoce que más de la mitad de los pasajeros pagan con tarjeta, pero esperan que siga avanzando el uso del prepago. “Al inicio de la administración teníamos un uso menor al 5%; ahora tenemos 56%. Hay un techo de crecimiento, que esperamos se pueda cumplir en los próximos meses (el 100% de cobertura)”.Yeriel Salcedo, académico del ITESO y especialista en movilidad, menciona algunos beneficios para la población con este sistema, como una mayor seguridad en el trayecto, con menos distracciones para los conductores. “Da mayor seguridad vial porque los conductores están concentrados en su labor de conducir, ya que hay menos distracción y no tienen que estar cobrando. Para la gente es más fluido porque ya no tienen que estar recibiendo el cambio. La gente puede administrarse con su dinero y pueden entrar a los descuentos”. La diputada de Movimiento Ciudadano, Mónica Magaña, quien fuera presidenta de la Comisión de Movilidad y Transporte del Congreso de Jalisco, comenta que la cantidad de usuarios que pagan su pasaje con tarjeta electrónica deja en claro que se trata de un avance significativo, aunque se debe aspirar a incrementar el uso del sistema de prepago.De acuerdo con el Gobierno de Jalisco, hay más de dos millones de tarjetas activas en el Estado. Pero hay quienes no la utilizan por distintos motivos. Por ejemplo, Brenda Gómez contesta que los lugares de venta no son prácticos para todos los usuarios. “Yo me muevo en camión, rara vez agarro el Tren Ligero, entonces no tengo dónde comprar una tarjeta. La verdad, no es que me pese, pero estaría bien que se pudieran comprar en más lados”.Las tarjetas electrónicas pueden comprarse en las máquinas VRT ubicadas en las estaciones de Mi Tren, Mi Macro Calzada y algunos paraderos de Sitren con un costo de 30 pesos. También se puede recargar en tiendas de autoservicio Oxxo en el Estado. Y mediante la aplicación del celular Mi Saldo, disponible para Android e iOS.El prepago fue una promesa de Gobierno desde las administraciones panistas, pero jamás se consolidó. En la presente gestión es cuando se documentó un mayor avance; sin embargo, los accidentes continúan, cuando se prometió que bajarían con este sistema. CT