Miguel Méndez Bernal, hijo del fundador de la empresa Ekar de Gas y actual director de la empresa, de manera altruista patrocina y participa activamente en numerosos eventos culturales, juveniles y musicales.Méndez Bernal recordó que a lo largo del tiempo se han utilizado muchas frases, pero sin duda la más emblemática es la de “Ekaaar de Gas”, que fue creada en la década de los 80 y desde entonces se ha reconocido esa forma tan peculiar de mencionar la marca.Su padre, Carlos Méndez Castillo, fundó el 13 de abril de 1973 la cadena Ekar de Gas cuando la industria del gas doméstico estaba en proceso de modernización. La primera sucursal se ubicó en la esquina de los Ángeles y R. Michel, en el Barrio de Analco, “a un salto de rana de la Central vieja de autobuses”.Ekar de Gas es una empresa icónica de la ciudad que cuenta con 19 sucursales en la Zona Metropolitana de Guadalajara. Miguel Méndez Bernal se involucró desde muy joven en la empresa. Una de sus primeras tareas era hacer las labores de limpieza.“Antes, llevarse a un niño a trabajar era una manera de enseñarte a vivir y ahora parece que es abuso infantil, han variado los criterios de manera abrupta”, comentó.Cuando su padre fallece se generaron algunos cambios en la empresa. En 2013, Méndez Bernal se hace cargo de la dirección general.En aquel entonces había 14 sucursales y en estos últimos años han inaugurado cinco tiendas nuevas. El directivo considera que su método de venta, privilegiando el dinero en efectivo, ha sido la clave del éxito de la empresa.“Una de las cosas que nos ha diferenciado de las demás empresas es la venta al contado, ha sido muy importante, hemos ofrecido un buen precio de contado y adquirir sin un cargo financiero gran parte de equipos de su hogar”.Aunque algunos clientes utilizan las tarjetas de crédito para financiarse, éstas no representan ni el 10 por ciento de las ventas totales.“La empresa inició así y hasta ahorita no hemos cambiado esa visión, aunque por etapas esto ha sido muy amenazado por la bancarización, pero hemos visto en el tiempo que la gente prefiere comprar de contado”, añadió.Considera que este año ha sido complicado para el sector de artículos de consumo debido a la crisis sanitaria y económica del COVID-19 y la guerra entre Rusia y Ucrania que ha impactado en algunos mercados.“Eso ha generado una carestía a nivel global, los productos de importación aumentaron su precio, hubo desabasto de materias primas y una serie de situaciones que complicaron la economía para el consumidor”, sostuvo.De acuerdo con el entrevistado en el sector se ha registrado un incremento del 15 al 20 por ciento. “Todos los años, no conozco un año donde no hay incrementos, antes porque subía el dólar, porque subía la gasolina, siempre ha habido un argumento por parte de los fabricantes y eso hace que suban rentas, costos y el precio de las mercancías”.Para sortear esta crisis, la empresa ha realizado diferentes estrategias que le permiten sobrevivir como la de precios bajos y permanencia continúa de ofertas.“El mercado de alguna manera subsiste, el asunto es quién se queda y quién se va, hemos visto que algunas marcas han desaparecido, siempre estamos en la cuerda floja de la supervivencia económica”.Méndez Bernal considera que la forma de vida y la forma de cocinar han cambiado por lo que las ventas también han variado lo que impacta en la compra de utensilios y los modelos de los enseres domésticos.“En el hogar ya no está el ama de casa como tradicionalmente estaba, las familias ya no se forman como antes, hay muchos jóvenes que prefieren vivir solos o con amigos y eso nos da otra lectura del mercado que ya quiere otras cosas y se maneja de otra manera”.