El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, aseguró que no busca ser la oposición del Gobierno de la República luego de que él y el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador se enfrentaran por el tema de desabasto de gasolina en Jalisco.Durante una entrevista para Luis Cárdenas, de MVS, el mandatario estatal reconoció que el avance de abasto de combustible ha mejorado en el Estado, sin embargo, aún están por debajo de lo que se requiere para que se normalice."Los últimos tres días hemos podido sostener un nivel de abasto del 90% de la demanda en Jalisco", dijo Alfaro durante la entrevista.El gobernador señaló que el abasto no podrá regularizarse hasta que el ducto Salamanca-Guadalajara opere con normalidad, cosa que no ha sucedido desde el pasado 20 de enero cuando se anunció su reapertura y que trabajaría de manera intermitente debido a las tomas clandestinas que se localizaron.Al preguntarle si creía que los choques con el Gobierno federal se dieron porque son de un partido político diferente, Alfaro reconoció que han sido unos meses difíciles iniciando con el tema de los superdelegados, el presupuesto y ahora el desabasto."Han sido dos meses de un trato lamentable para nuestro Estado; espero que en los próximos días el presidente ayude a mandar un mensaje de que no hay un asunto político por el trato a Jalisco", sentencióAseveró que sólo ha levantado la voz ante los problemas que enfrenta el Estado y con ánimo de solucionar cualquier conflicto, ha buscado reunirse con López Obrador, sin embargo, no ha obtenido respuesta de éste. El gobernador del Estado informó que debido al desabasto de gasolina en los últimos 21 días, las pérdidas que se han registrado van de 300 a 500 millones de pesos diarios, además el Producto Interno Bruto (PIB) de la Entidad tuvo una afectación del ocho por ciento.Debido a esto, el gabinete estatal ya comenzó a trabajar en un plan de recuperación económica.GC