Mientras en Oaxaca un caso por presunta irresponsabilidad médica es manejado como homicidio y por la vía penal, en el contexto de la acusación a un galeno de esa Entidad, en Jalisco, la mayoría de las quejas de pacientes hacia médicos se resuelve mediante la conciliación.En los 16 años de historia de la Comisión de Arbitraje Médico de Jalisco (Camejal), se han atendido tres mil 375 quejas relacionadas con personal de diferentes disciplinas del ramo de la salud, como la medicina, odontología y enfermería.De éstas, cerca de 70% se ha resuelto por medio de conciliación entre los afectados y el profesional señalado, ya sea por indemnización económica, reposición del tratamiento o con explicación detallada sobre el hecho que propició la queja.El titular de la Camejal, Salvador Chávez Ramírez, señaló que en ninguna de las quejas atendidas se ha concluido con cárcel para el imputado, pues todo se ha podido arreglar por la vía civil.De 30% de los casos restantes, la mitad se resuelve en un “acuerdo de banqueta” entre el profesional de la salud y el quejoso, mientras que el resto se va al ámbito judicial, que en los últimos años ha incrementado.“Vemos a veces cómo la gente sale muy enojada, no estuvieron de acuerdo en lo que aquí se proponía como arreglo y de manera directa se van a la Fiscalía a interponer una demanda. Lo que a mí me parece es que se ha venido incrementando la cantidad de casos que se van al sistema judicial, creo que hay una visión de los profesionales del derecho donde, quiero decirlo así, están viendo una ventana de oportunidad cada vez más clara para ofrecer sus servicios profesionales”.Esto ha propiciado que cada vez más médicos tengan una póliza de asesoría jurídica, para que, en caso de tener un problema con un paciente, puedan resolverlo por la vía judicial. “Esto es un grave error, es muchísimo más ágil y sencillo solucionar los problemas en el medio de justicia alternativa en el que en cuatro, ocho o 12 semanas se pueda solucionar un problema, que en un juicio lleva tres años”.Problemas post quirúrgicos, complicaciones y consecuencias no deseables; mala comunicación entre el profesional y el usuario, y engaños en promociones de servicios médicos.La madrugada de este viernes se reportó el fallecimiento de una mujer afuera de las instalaciones de la clínica 42 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con sede en Puerto Vallarta; aunque la dependencia señaló que la mujer llegó sin vida al hospital, los familiares insistieron que la muerte derivó de la falta de atención de dicha institución, según medios locales.Juana “N”, de 59 años, era originaria de la comunidad de Llano Grande, en Tomatlán, y al parecer padecía de hipertensión y diabetes. La noche del jueves comenzó a sentirse mal. Su esposo la trasladó a la unidad médica a 140 kilómetros en Puerto Vallarta.Según testimonios de medios vallartenses, el esposo dijo que tardaron cuatro horas en llegar a urgencias de la clínica, pero, según la versión de esta persona, se negaron a atenderla.La Delegación del IMSS en Jalisco afirmó que cuando la mujer llegó a la unidad ya había fallecido, de acuerdo con un comunicado.A horas de haber abandonado el penal de Santa María Ixcotel, en donde permaneció desde el 4 de abril, el traumatólogo pediatra Luis Alberto Pérz, acusado del homicidio del paciente menor de edad, Edward, manifestó su indignación sobre la criminalización del acto médico.Luis Alberto destacó que no está pidiendo impunidad, sino que el proceso que enfrenta se realice conforme a derecho.“Con todo respeto hacia la familia de mi paciente, entendemos el dolor de la familia, algunos lo hemos experimentado. No es nada fácil. En mi caso, espero que la familia encuentre un consuelo y resignación”, dijo el doctor en rueda de prensa.Frente a los representantes de algunos medios de comunicación, reiteró que los médicos nunca tienen la intención de dañar a sus pacientes.Señaló que “cualquier médico podría encontrarse en la misma situación” y dijo que es indignante que la condena del acto médico suceda en el Estado de Oaxaca.Tras los cuestionamientos de la prensa, el doctor evitó hablar sobre lo que sucedió el día en que Edward murió y aseguró que todo se encuentra en manos de las autoridades.Galenos de alrededor de 30 colegios y asociaciones de especialidades médicas de Jalisco se reunieron en el patio del Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, para exigir que los casos de errores o presuntas negligencias en los que se vean envueltos sean tratados por la vía civil y deje de criminalizarse su actuar.Bajo la protesta de “no somos delincuentes”, el presidente de la Sociedad Médica del Hospital Civil, Rafael Santana Cruz, anunció que se enviará una solicitud al Senado para exigir que se modifique el Código Penal y se retome la iniciativa que se envió desde abril de 2017.“Queremos lograr que el Senado y el Congreso de la Unión retomen la iniciativa para relegislar y cambiar esa forma de abordar esos casos médicos legales, de la penal, a la civil”.Además del tema legal, Santana Cruz insistió en la necesidad de que los hospitales cuenten con más recursos para contar con los insumos necesarios, pues esto también expone a los médicos al momento de hacer una cirugía o tratamiento.El pronunciamiento se dio en el marco del caso que vive el médico de Oaxaca, Luis Alberto Pérez, quien fue encarcelado y recientemente liberado, tras ser acusado de homicidio de un paciente al que operó.Irene Córdova Jiménez (profesora de Bioética y Legislación del CUCS de la UdeG)En Jalisco, cuando un paciente tiene la percepción de que el médico no le brindó atención adecuada y quiere iniciar un proceso de queja en su contra, existen diversas alternativas para hacerlo.Puede ser por medio de una inconformidad directamente en la institución donde se realizó el procedimiento, con un proceso de conciliación, por la vía judicial con la reparación del daño, ya sea por la vía civil o por la penal, a través del concepto de la responsabilidad médica.Cada Estado tiene su propio Código Penal, el cual clasifica los delitos como dolosos y culposos, mencionó la profesora de Bioética y Legislación del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Irene Córdova Jiménez. “Esto es gran parte de la controversia que surge con lo de Oaxaca. La mala interpretación que parece ser que el mismo fiscal está haciendo de estos conceptos; un delito doloso es el que se quiere cometer, y uno culposo es el que se produce una consecuencia que afecta a alguien, pero que el actor no quería que se produjera”.La responsabilidad médica aparece en el Título Octavo de Responsabilidad Profesional del Código Penal del Estado de Jalisco, con supuestos muy específicos en los que el médico puede verse envuelto y ser juzgado por ello.Algunos de los delitos de responsabilidad médica son abandonar al paciente sin causa justificada, o que no se preste el servicio a un enfermo en el que sea evidente la urgencia, entre otros. Aun cuando un médico fuera acusado por alguno de estos delitos, tendría posibilidad de amparo y defensa.La experta aseguró que otro tema importante en el caso del médico de Oaxaca es su integridad e identidad, pues no se le ha dado el tratamiento adecuado y ya se dañó su imagen.
