Laboratorios como Pfizer, Johnson & Johnson y el fabricante de Sputnik V ya empezaron a trabajar en nuevas versiones de sus vacunas contra el COVID-19 para combatir la variante Ómicron.“Hemos comenzado a trabajar desde el viernes. Hemos hecho nuestro primer modelo de ADN, que es la primera etapa del desarrollo de una nueva vacuna”, afirmó durante una entrevista el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla.Johnson & Johnson señaló en un comunicado “estar evaluando la eficacia de su vacuna contra el COVID-19 frente a las variantes” y anunció que ya se enfoca “en una vacuna más específica para Ómicron”.En el caso del Instituto Gamaleya y el Fondo Ruso de Inversión Directa, que financió la Sputnik V y su versión de una sola dosis, Sputnik Light, se destacó que “basado en los protocolos existentes de desarrollo inmediato de versiones de la vacuna para variantes de preocupación, se ha comenzado a desarrollar la nueva versión de la vacuna Sputnik adaptada para Ómicron”.Por otra parte, el secretario de Salud en Jalisco, Fernando Petersen, llamó a la población a mantener las medidas preventivas ante la temporada invernal.“Aunque estemos vacunados, aunque sean vacaciones y tiempo de festejos, usa cubrebocas, tapando nariz y boca, lávate las manos frecuentemente y evita lugares con poca ventilación y grupos grandes de personas”, dijo en un mensaje que emitió a través de redes sociales. Aunque aún continúan las investigaciones de Ómicron, la nueva variante de COVID-19, especialistas estiman que tiene cuatro veces mayor velocidad de propagación que la variante Delta, según los datos preliminares de Sudáfrica, donde se descubrió.Carlos Alonso Reynoso, epidemiólogo y académico e investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG), resaltó que pese a ser más contagiosa, no se sabe si es más letal o si podría afectar la inmunidad adquirida por la vacuna o una infección previa, por lo que recomendó no alarmarse.Sin embargo, dijo que es importante no relajar las medidas sanitarias que ya todos conocen como el uso del cubrebocas y gel antibacterial, así como evitar aglomeraciones.Además, sugirió a las autoridades la instalación de filtros sanitarios para entrar al país, así como prueba negativa como requisito o el esquema completo de vacunación.Fue el viernes pasado cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó que es una variante de preocupación, que se clasifica principalmente por su transmisibilidad y mutación.Entre los escenarios que prevé como especialista, Alonso Reynoso afirmó que el mejor sería que la enfermedad provocada fuera leve, con menos síntomas y menos letal, aunque más contagiosa, con lo que sustituiría a la variante Delta y favorecería que fuera una enfermedad estacional.Mientras que el peor escenario es que sea más letal y complicada, con lo cual el panorama no es alentador: podría haber más hospitalizados y muertes independientemente de que tengan la vacuna.Sin embargo, explicó que pese a que ningún escenario se puede anticipar hasta no contar con más información, de todas maneras se sobrecargará al sistema de salud.“Por más leve que sea la enfermedad, se necesita detectar y las personas acudirán a los centros de salud y hospitales. Es mejor empezar a poner restricciones. No se trata de caer en pánico, pero tampoco de no hacer nada. La acción más adecuada es seguir las recomendaciones de hasta ahora y vacunarse. Si nos vacunamos, disminuimos el riesgo de propagación”, expresó.MQ
