El director del Sistema de Tren Eléctrico Urbano (Siteur), Rodolfo Guadalajara, informa que en un mes comenzará la construcción de elevadores en las estaciones subterráneas de la Línea 1, con lo que brindarán un servicio incluyente y de accesibilidad universal en toda la red. “La inversión será de alrededor de 25 millones de pesos. Es un recurso que viene del DIF Jalisco. Lo vamos a ejecutar nosotros para complementar los puntos y, con eso, todo el sistema es accesible”.Los estaciones que no tienen elevador son: División del Norte, Ávila Camacho, Mezquitán, Refugio, Mexicaltzingo y Washington. Guadalajara añade que las estaciones en superficie tendrán rampas. El recurso para los ascensores se ejecutará, calcula, a más tardar en noviembre próximo.El funcionario recuerda que la Línea 2 ya cuenta con accesibilidad universal, elevadores en las estaciones Juárez, Plaza Universidad, San Juan de Dios y Tetlán, y salvaescaleras en La Aurora, San Jacinto, San Andrés, Cristóbal de Oñate, Oblatos, Belisario Domínguez y San Juan de Dios.Con las salvaescaleras, los usuarios aprietan un botón para usar la plataforma que los ayuda en el ascenso o descenso al tren. Está pensado para población con discapacidad, personas de la tercera edad, mujeres embarazadas o ciudadanos con movilidad reducida.También se instalaron 40 planos hápticos (mapas en sistema braille) y 40 tótems informativos en los ingresos.• Los 72 elevadores para la Línea 3 tendrán diferente capacidad; unos para transportar ocho personas y otros hasta para 17. Estos últimos serán colocados en estaciones donde se espera un mayor número de usuarios, como en las terminales o transbordos.• Ambos modelos tendrán equipo que permitirá monitorear en tiempo real su funcionamiento y realizar órdenes de mando remotas por parte de operadores.• Las escaleras eléctricas o mecánicas permitirán unir desniveles desde 4.3 y hasta 11.5 metros. Incluyen alumbrado y disponen de un sistema de paro en caso de algún incidente.• Para reducir el consumo de energía, las escaleras sólo funcionarán cuando un usuario las utilice y cuando no haya necesidad de uso se apagarán por medio de sensores.