La sequía y las lluvias esporádicas en gran parte del Estado provocan un rezago en la recuperación de las presas de la entidad. Datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) revela que la captación de agua en las presas es 30 por ciento menor comparado al mismo periodo de 2022.El año pasado, al cierre de agosto, había presas que rebosaban y requerían desfogues; este año no hay ninguna que supere el 100 por ciento de su capacidad.A pesar de estar dentro del temporal, agosto de 2023 fue uno de los más secos en los últimos 20 años. Datos de la Conagua revelan que 44 por ciento del territorio se encuentra en condiciones de sequía extrema (78 municipios), 26.1 por ciento con sequía severa (36 municipios); 13.4 por ciento con sequía moderada (siete municipios), 6.8 por ciento del territorio anormalmente seco (tres municipios) y solamente el 9.5 por ciento de la superficie estatal no cuenta con afectaciones.Las precipitaciones esporádicas y poco intensas en gran parte de la entidad, provocado por fenómenos meteorológicos del Océano Pacífico, ocasionan que las presas no recuperen su nivel.Dos de los más importantes surtidores de agua para la Zona Metropolitana de Guadalajara, la Presa Calderón y el Lago de Chapala, también presentan estragos.En el caso de la Presa Calderón, hace un año se encontraba a 95 por ciento de su capacidad, este año llega sólo a 39 por ciento. El Lago de Chapala, por su parte, está sólo a la mitad de su capacidad, mientras en 2022 ya se encontraba a 69 por ciento.La situación de la Presa Calderón impacta directamente a la ciudad y fue la causante que en 2021 se registrara carestía de líquido en gran parte de la metrópoli, según explicaron las autoridades.En 2020, las lluvias en la cuenca no fueron suficientes para abastecer por completo la presa y no alcanzó los niveles óptimos. Derivado de la pandemia por el Covid-19, los patrones de consumo de agua en los hogares se modificaron y se elevó hasta en 11%.De la presa sale alrededor de 14% del agua que abastece a la ciudad a través de la planta de San Gaspar, el resto viene del Lago de Chapala y de pozos profundos.Recientemente el gobernador del Estado, afirmó que el próximo año no habrá desabasto de agua por la puesta en operación del acueducto que traerá el líquido desde la Presa El Zapotillo.El año pasado había presas que superaban el 100 por ciento de su capacidad como la presa de La Vega (su nombre real es presa Ingeniero Santiago Camarena); la presa El Salto, La Red, Cajón de Peña (mejor conocida como Tomatlán), la presa Corrinchis, la Valencia y la Santa Rosa; ahora en promedio, se encuentra a sólo tres cuartas partes de su capacidad.Las presas Garabatillos y El Cuarenta, ambas localizadas en Lagos de Moreno, son las que se encuentran en el nivel más bajo, pues no rebasan el 25 por ciento de su capacidad. MF