Ahora que entró en vigor la reforma al Código Penal estatal, que endurece las sanciones por el delito de maltrato animal y que ordena a los ayuntamientos cumplir con adecuaciones materiales, sanitarias y de capacitación, Virgilio Bucio Reta, director General de Fomento Agropecuario de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), informó de un fondo de apoyo para los municipios.Los rastros y centros de matanza de animales para consumo humano, públicos o privados, tienen un año para corregir fallas y evitar el maltrato animal o, de lo contrario, los responsables pueden enfrentar penas de hasta cuatro años de prisión y multas de 84 mil 500 pesos.Virgilio Bucio detalló que destinarán una bolsa de 75 millones de pesos (MDP) que se ampliaría hasta 110 MDP con la aportación de los ayuntamientos. Aseveró que trabajan en conjunto con la Secretaría de Salud estatal para verificar el acatamiento de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) en la materia.“Creo que se cumple más de 75% (de la norma). Jalisco es un Estado en el que se ha avanzado mucho, se han hecho inversiones y está creciendo. Estamos poniendo especial interés en la Zona Metropolitana de Guadalajara donde tenemos una gran matanza. En la zona de los Altos, con el sector lechero; en la zona Norte y Costa que son las áreas de engorda del ganado”, informó.Los 45 ayuntamientos que solicitaron el apoyo deben presentar el proyecto y la Sader los evaluará y autorizará. Los recursos se tendrán que ejecutar a más tardar el 30 de noviembre.Protectores de animales aseveran que el panorama general en el Estado es de incumplimiento en todos los rastros públicos y privados.En la mira Para buscar que se consolide como el centro de matanza metropolitano, el Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) presentará un plan para reactivar el rastro de Acatlán de Juárez.El director General de Fomento Agropecuario, Virgilio Bucio Reta, informó que se invertirán alrededor de 10 millones de pesos para hacer adecuaciones. Detalló que trabajan en el acuerdo con los empresarios y ganaderos que invirtieron en el proyecto que, aunque se inauguró en pasadas administraciones, no se ha consolidado.“Lo que estamos haciendo es coordinar acciones con quienes invirtieron en el rastro y resolver temas de mejoramiento de la infraestructura como el funcionamiento de la planta de tratamiento de aguas residuales, para que esté en condiciones de poder operar”, comentó. Si consiguen que el rastro metropolitano de Acatlán tenga mejores condiciones, los ayuntamientos del Área Metropolitana de Guadalajara podrán optar por cerrar sus rastros municipales y ofrecer a los productores el servicio de matanza en el rastro metropolitano, dijo.El rastro de Acatlán implicó una inversión de alrededor de mil millones de pesos de recursos públicos y privados. Arrancó operaciones a mediados de 2016 pero fue clausurado por el Ayuntamiento de Acatlán debido a fallas en la planta de tratamiento. El funcionario recordó que este año la administración estatal inició con el rescate de infraestructura con la intervención en el rastro de Lagos de Moreno donde el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, anunció inversión de 11 millones de pesos para conseguir la certificación como rastro Tipo Inspección Federal (TIF). Este rastro tenía más de cuatro años parado.La activista Dulce Ramírez de la agrupación Igualdad Animal, advirtió que las normas sobre el buen trato a los animales no se cumplen incluso en los rastros TIF, como el de Acatlán, pues la certificación que reciben se centra en las medidas de sanidad y el sacrificio mediante una matanza aérea para que los productos cárnicos no estén en contacto con el suelo. En Jalisco hay 129 rastros municipales, 15 privados y cuatro TIF.
