En desarrollo de las jornadas de oración por la pacificación del país y por encontrar a los miles de personas desaparecidas en Jalisco, el cardenal Francisco Robles Ortega señaló que todas y todos los ciudadanos son parte del problema de inseguridad que azota al estado, y que ha habido poca empatía por el tema, por lo que enfatizó que desde la fe permanecerán en oración por las familias de los afectados y reitera su apoyo para quien lo solicite, del mismo modo pidió a los fieles a ser parte de la solución para erradicar la descomposición social.“A intención de toda la Conferencia del Episcopado Mexicano y decir de toda la Iglesia en México para pedir por las víctimas de la violencia y especialmente por desaparecidos y sus familiares y para que se restablezca en nuestra patria, la paz, la concordia, la sana convivencia la unión de la sociedad y superemos esa división ese rompimiento del tejido social, que padecemos en este momento”, afirmó el cardenal.Señaló que el propósito que ahora buscan desde las oraciones y asambleas públicas es generar conciencia sobre el contexto de violencia y al mismo hacer empáticos sin tener necesidad de padecer del dolor de la desaparición forzada, preciso que muy pocas personas tienen la voluntad de ser parte de la solución y por ello invita a los creyentes a apoyar a quienes permanecen en la búsqueda.“Independientemente de que padezcamos o no en este momento alguna situación de violencia, si estamos obligados a solidarizarnos con los que la sufren y estamos obligados a construir condiciones de sana convivencia y de paz, todos somos corresponsables de la salud de nuestra vida de nuestra familia y de nuestra sociedad, todos tenemos parte en el problema y todos tenemos parte en la solución”, continuóTambién pidió a las autoridades realizar sus labores por medio de esquemas que fortalezcan la institución de la familia y evitar re-victimizar a los afectados o los implicados poniéndolos en tela de juicio, precisó que no puede haber impunidad en los casos de violencia y que es necesaria la aplicación de la ley.“Aquí a quienes llamamos, en primer lugar, es a las autoridades, mientras haya delincuencia sin aplicación de la ley, es decir, delincuencia con impunidad, pues esto se va a grabar cada vez más, entonces las autoridades tienen que hacer lo suyo, lo propio, pero también nosotros como sociedad debemos no dar cabida en el seno de las familias, de nuestras comunidades y pueblos, no dar cabida a comportamientos que son destructivos de la convivencia y que son una amenaza a la integridad de la vida y de las personas”, señaló.“Las autoridades tienen una tarea pendiente con la familia, además de favorecer esquemas que le ayuden a la familia, que la fortalezcan como institución base de nuestra sociedad, muchas veces vemos que la familia es combatida, es cuestionada, es puesta en tela de juicio, que ya no es sano”, finalizó.