Autoridades de los tres órdenes de gobierno ya trabajan en operativos para clausurar negocios y destruir máquinas tragamonedas en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), sin embargo, estas labores están a cargo de las autoridades federales, informó Verónica Delgadillo, Presidenta municipal de Guadalajara, por lo que aún no se plantean operativos específicos.“Desde hace meses se está trabajando. Desde que yo asumí como presidenta municipal en las reuniones de seguridad con el gobernador en turno y ahora Pablo Lemus se había trabajado con las autoridades federales en operativos para poder atender ese tema. Está en manos de ellos (autoridades federales) los operativos; hay que responder al orden de autoridades y esto es un operativo en el que ellos están y van a tener todo el acompañamiento de nuestra parte. Tanto la Guardia Nacional como el Ejército son los que están a cargo de estos operativos”, adelantó Delgadillo.Pese a que estas maquinitas están prohibidas por la Ley Federal de Juegos y Sorteos y el Reglamento para el Centro de Apuestas de Jalisco, éstas operan con impunidad en tiendas de abarrotes y mercados municipales.Especialistas y académicos reconocieron que representan un riesgo para los menores de edad que juegan en ellas, pues podrían desarrollar ludopatía o adicción al juego en la edad adulta.Según cifras de la Secretaría de Gobernación, estás máquinas generan ingresos de alrededor de 600 millones de pesos semanales. Aunque sólo están permitidas en casinos certificados, en la calle Pino Suárez, en las inmediaciones del Mercado Alcalde en Guadalajara, hay un establecimiento dedicado exclusivamente a las tragamonedas. En tanto, en avenida Acueducto, en la colonia Jardines del Valle, en Zapopan, al lado de la Secundaria Mixta número 42 operan con impunidad afuera de tiendas de abarrotes, casas y papelerías.“El juego con el que se inicia la ludapatía es precisamente con las máquinas de apuestas y tragamonedas. Esos son los juegos que tienen un porcentaje más alto de búsqueda entre los niños y es el predictor más importante. Si están al alcance de los niños pueden comenzar a desarrollar esta dependencia hacia el juego y hacia apostar […]. Mientras a más temprana edad, hay más riesgos. Hay niños que están iniciando el juego desde los 10 años que luego se convierten en jugadores patológicos”, aseguró Elsy Chan Gamboa, profesora de psicología de la UdeG.Por su parte, Francisco Jiménez Reynoso, académico de la misma casa de estudios e integrante del Observatorio de Seguridad, apuntó que las autoridades han hecho caso omiso a los llamados a clausurar estos negocios y maquinitas ante el riesgo que representan para niños y adolescentes, y sentenció: “la autoridad municipal, porque hay que ponerle nombre y apellido, no quiere clausurar los negocios o ese tipo de giros porque hay ganancias, a través de la corrupción, para ellos”.NA
