El Fiscal del Estado, Gerardo Octavio Solís, indicó que el retraso en las investigaciones en torno a la desaparición de tres personas de origen peruano y un mexicano se debió a que estas iniciaron con “información falsa”, lo cual, dijo, volvieron las indagatorias “incongruentes”.De acuerdo con el fiscal, las investigaciones iniciaron con la desaparición de dos hombres, cuyas denuncias fueron presentadas el 13 de agosto pasado, pero no se dijo desde el inicio que eran de nacionalidad peruana.“Es importante referir que cuando se presenta esta denuncia ambas concubinas dan un nombre diferente al real y también dan una nacionalidad diferente, dieron su nombre como si fueran mexicanos y pudimos aseverar que eran mexicanos, ahí se menciona que recibieron una llamada en la que se les había informado que fueron puestos a disposición de la policía municipal, probablemente con fecha del 13 o 14 de agosto, muy probablemente por un choque”, explicó el fiscal.Según refirió, las concubinas de estos dos hombres contactaron a una abogada que contrataron por 60 mil pesos “para hacerse cargo del asunto” y no fue sino hasta el 31 de agosto, una vez que se recibió la comparecencia del cónsul de Perú, que se supo el verdadero nombre y la nacionalidad de los desaparecidos.“Gracias a la comparecencia del cónsul también menciona que no iban solos, sino que iban acompañados de una mujer, también de nacionalidad peruana, incluso hace referencia de que venía también un cuarto individuo de nacionalidad mexicana, gracias al cónsul se logró salvar la versión inicial que estaba vertida, deliberadamente, con información falsa”, añadió.Durante las investigaciones, dijo, se supo también que la hermana de Mary Mescco, la joven peruana desaparecida, recibió una llamada por parte del novio de Mary “para decirles que los tenían secuestrados y que él iba a ser el intermediario para tratar de salvar el secuestro. A raíz de esta llamada, por información que tenemos para corroborar, estuvieron haciendo una serie de depósitos a unas cuentas por cantidades altas, tentativamente para resolver el secuestro”, según manifestó Solís Gómez.Consideramos que nuevamente se volvió a incurrir, por alguien cercano a las víctimas en un acto de defraudación a la familia, dado que no existieron datos de que realmente haya sido un negociador o haya intervenido en la liberación de estas personas”, añadió.El Fiscal señaló que de acuerdo con las investigaciones y con una entrevista realizada al alcalde de Atotonilco el Alto, Cruz Carrillo, por un medio radiofónico local, las cuatro personas sí fueron detenidas por la comisaría municipal ante una presunta extorsión, pero no fueron puestos a disposición del Ministerio Público debido a que los hechos quedaron únicamente como una “falta administrativa”.Cuando se cuestionó al fiscal sobre si se tiene planeado investigar a la Policía de Atotonilco el Alto, el fiscal solo refirió que “cualquier persona que haya tenido contacto con ellos tendría que ser agotada la investigación”.Por último, Solís Gómez aseguró que ya se tiene comunicación con los familiares de las personas a través de llamadas telefónicas y correos, con quienes colaboran para dar con el paradero de las cuatro personas, aunque del mexicano no se ha dado información alguna por parte de la dependencia.NR
