Patricia Rivera se enteró del tiroteo en el Reclusorio de Sentenciados de Puente Grande antier al mediodía. Su hermano cumple allí una condena. Sin embargo, desde ese entonces no ha podido averiguar si él es uno de los ocho fallecidos y ocho heridos que dejó, según el director de Reinserción Social en la Entidad, José Antonio Pérez, la riña entre reos. “Dijeron que había dos heridos adentro y un custodio. No pensamos que fuera tan grande. Ya más tarde dijeron que había un muerto. Y en la noche nos fuimos enterando de que eran ocho”, comentó. María Almaraz supo del del enfrentamiento hasta la tarde del viernes y se preocupó por su hijo Francisco. “Cuando me enteré de la noticia sentí angustia, angustia de saber qué estaba pasando, porque no dejaban pasar, no daban información, no daban nada”. Tras la balacera en el penal, la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) pidió a las autoridades que se esclarezcan los hechos y que se resguarde la integridad de los lesionados.Cuestionan al director de penal por tiroteo“Debe de haber algún corrupto, porque al haber armas adentro...”, cuestionó una mujer al director de Reinserción Social, José Antonio Pérez Juárez, sobre la balacera ocurrida en el Reclusorio de Sentenciados, cuando se supone que los internos no deben tener pistolas. “No hay nada oculto entre el cielo y la tierra”, respondió.La tarde del viernes ocurrió una riña entre internos, hecho que dejó ocho muertos y ocho heridos. Las autoridades aseguraron dos pistolas y un artefacto explosivo casero.La noticia provocó que cientos de familiares acudieran a las afueras del lugar el mismo viernes para saber si su pariente era uno de ellos, y porque tras la contingencia sanitaria, sin visitas, tienen menos noticias.Según Pérez Juárez, el cese de las visitas dentro del Reclusorio de Sentenciados fue iniciativa de los reos ante el temor del contagio a COVID-19. “Ellos decidieron que no entraran (los familiares), no yo”, justificó el director.Otra mujer inquirió al encargado del penal por la existencia de un autogobierno, pues se cree que en Puente Grande los presos hacen sus reglas.“No, no son los que mandan, se la pongo bien fácil, ayer yo pude haber metido 500 militares, pero algo pudo haber sucedido”, respondió.Tras la balacera ocurrida el viernes en el Reclusorio de Sentenciados de Puente Grande, la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) envió personal para atender a los familiares de los reclusos y verificar lo ocurrido, tras lo que realizó una serie de solicitudes, entre ellas, apoyar a las familias de las víctimas mortales con los gastos funerarios. Tras entrar en contacto directo con familiares, la comisión inició 113 actas de investigación derivadas de igual número de entrevistas con personas en dicho centro, además de una queja oficiosa por las personas que fallecieron en los hechos. Además de los apoyos en gastos funerarios, solicitó proporcionar a los familiares de las víctimas directas garantizar sus derechos como víctimas de delito, conforme a la Ley General de Víctimas. En cuanto a los hechos, demandaron aclararlos y tomar las medidas necesarias para garantizar que no se repetirán. Desde que la CEDHJ tuvo conocimiento de los hechos abrió el acta de investigación 190/2020/IV y se dictaron medidas cautelares dirigidas al secretario de Seguridad del Estado y al director general de Prevención y Reinserción Social, que incluía brindar información veraz y oportuna a los familiares de las personas privadas de su libertad respecto al estado que guardan dentro del reclusorio.