En los primeros tres meses del año, el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) registró más fallecimientos por armas de fuego que por accidentes viales y diferentes enfermedades.Entre el 1 de enero y el 31 de marzo se llevaron a cabo 469 autopsias por impactos de bala. En el mismo periodo se determinó el deceso de 189 personas por choques, atropellamientos y volcaduras. El IJCF apuntó 178 pérdidas por infartos, edema pulmonar, hemorragia cerebral y neumonía.En febrero de 2017, este medio de comunicación publicó que de 2.8 millones de armas que los civiles usaron para fines deportivos, de caza y para proteger sus domicilios, el Estado ocupó el segundo lugar después de la Ciudad de México.En ese entonces se contabilizaron 94 mil cortas y 166 mil largas en la Entidad. Sin embargo, un análisis del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados estimó que en México circulan 15 millones de armas, de las cuales 85% carece de licencia.“Los estados que han adquirido la mayor cantidad de armas de fuego de manera legal son, también, muchos de los que tienen el mayor número de enfrentamientos armados y homicidios perpetrados en el contexto de la guerra contra las drogas”, acentuó, en agosto de 2018, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos Humanos.