Entre febrero y septiembre de 2016, Víctor “N” abusó de una menor de edad en Autlán. Tras ser denunciado, fue sentenciado en 2018 a 18 años de prisión por abuso sexual infantil agravado y violencia intrafamiliar. Sin embargo, las sentencias de este tipo no son comunes. Aunque desde 2014 se registraron más de nueve mil denuncias por violencia familiar al año, en promedio sólo hubo 71 condenas, según datos de la Fiscalía del Estado obtenidos vía Transparencia. Esto significa que por cada mil denuncias presentadas, solamente se obtuvieron ocho fallos condenatorios, una cantidad que no alcanza ni 1% por ciento.Los casos de este tipo subieron 25% respecto a los de 2018, de acuerdo a la Fiscalía del Estado; especialistas acusan falta de voluntad política para reducir esos episodios violentos María de Jesús llegó la noche del domingo 15 de marzo a su casa en Loma Verde, municipio de El Salto. La mujer vivía sola con sus tres hijas, pues se había separado de su pareja por episodios de violencia familiar, sin embargo, esa noche él la visitó, relataron testigos. En la madrugada del lunes, el ex esposo la asesinó. Durante 2019 se denunciaron ante la Fiscalía del Estado 11 mil 053 casos de violencia familiar, lo que representa 30 denuncias diarias, según datos de la dependencia. La cifra superó el número de querellas reportadas en 2018, cuando sumaron ocho mil 850 casos, lo que representó un aumento de casi 25 por ciento. Esto ocurrió en el primer año del nuevo Gobierno estatal, después de que la administración desapareció el Instituto Jalisciense de la Mujer (pese a las demandas de colectivos feministas) para dar paso a la nueva Secretaría de Igualdad Sustantiva Entre Mujeres y Hombres (SISEMH). En 2020 la tendencia prevalece, pues mientras en enero de 2019 se registraron 686 denuncias, en el mismo mes de este año ya suman 784, un 15% más. Guadalupe Ramos Ponce, integrante del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (Cladem), atribuyó el incremento a la falta de voluntad política del Gobierno y de una estructura operacional para atender los casos de violencia contra las mujeres. “Ahora entran en vigencia las órdenes de protección, pero no hay cambios sustanciales en el sistema de justicia, que sigue siendo el mismo”, afirmó. La investigadora Lucía Almaraz, actual presidenta del Comité de Participación Social (CPS) del Sistema Estatal Anticorrupción, explicó que el machismo persistente en Jalisco hace que a los hombres les importe poco la igualdad y la alerta de género. “Jalisco es un Estado conservador y patriarcal que viene arrastrando estereotipos como el hombre machista y tomador”, manifestó. Investigaciones iniciadas en Jalisco por violencia familiarAño Investigaciones 2014 4,576 2015 8,543 2016 11,431 2017 9,557 2018 8,850 2019 11,053 Fuente: Dirección General en Delitos de Violencia contra las Mujeres en Razón de Género y Trata de Personas/Fiscalía Especial Regional.Sentencias condenatorias obtenidas por violencia familiar*Hasta septiembre; **Hasta agosto Fuente: Dirección General de Seguimiento a Procesos/Fiscalía Especial Regional.En febrero de 2019, Alejandro llegó a la finca que habitaba junto con su pareja en la Colonia Independencia, en Guadalajara. Éste comenzó a discutir con ella y la golpeó, la sujetó por los brazos y la arrojó al suelo, provocándole lesiones en la cabeza. La víctima acudió a denunciar el hecho y, cinco meses después, se vinculó a proceso al agresor.Entre lo ordenado por el juez se le prohibió al hombre no acudir a ciertas reuniones o lugares y no acercarse a su pareja. Sin embargo, no se le decretó prisión preventiva. Aunque también hay denuncias de hombres afectados por la violencia intrafamiliar, actualmente nueve de cada 10 casos son en contra de las mujeres, según datos de Transparencia de la Fiscalía del Estado. En 2018, por ejemplo, de las ocho mil 850 denuncias, las mujeres fueron víctimas en ocho mil 085 y solo 765 correspondieron a hombres. Hasta agosto de 2019, 631 varones sufrieron algún tipo de violencia en sus casas.Guadalupe Ramos Ponce, integrante del Comité de América Latina y El Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres, explicó que incluso cuando existen casos de violencia familiar en contra de hombres, ello no significa que sean mujeres las agresoras, sino otros varones en contra de algunos integrantes masculinos de la familia. Por ejemplo, en contra de niños, adultos en situación especial o mayores que son víctimas de diversas vejaciones. “En un ambiente familiar se cruzan otro tipo de discriminaciones y violencias. Los niños y los adultos mayores también están sujetos a otros tipos de violencias, pero las niñas y las mujeres sufren la mayor incidencia”, explicó Ramos.Por cantidad de población, la Zona Metropolitana de Guadalajara es la que concentra los casos de violencia familiar en la Entidad; sin embargo, existen regiones donde el número de denuncias también las convierte en focos rojos, como la zona de Los Altos. Por ejemplo, en todo 2018 Lagos de Moreno registró 110 denuncias y Tepatitlán 111, cuando en ese año solo cuatro municipios superaron los 100 casos en todo el Estado. En 2019, Lagos de Moreno presentó 111 casos y Tepatitlán 151, hasta agosto. De acuerdo a expertos, Guadalajara es privilegiada en comparación con las otras regiones de la Entidad porque hay más acceso a lugares de denuncia, como la Fiscalía del Estado o el Centro de Justicia para las Mujeres. Sin embargo, hay zonas que presentan un índice muy alto de violencia que, además, no es atendida. La contingencia por la pandemia del COVID-19 ha motivado a las autoridades en Jalisco a tomar medidas de aislamiento social y reclusión en los hogares, lo que significa que muchas de las víctimas de violencia familiar deberán pasar más tiempo con sus agresores, advirtió Guadalupe Ramos Ponce, integrante del Comité de América Latina y El Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (Cladem). “Lo que nos preocupa es que con esta contingencia de estar en casa y demás esta problemática de violencia de género se incrementa. Nos llaman a recluirnos en el hogar, pero cuando se hacen sin planes de nada, sobre todo con problemáticas de violencia intrafamiliar y feminicidios, entonces sí es preocupante”. Ramos recordó que en otras entidades como en Nuevo León sí se han tomado medidas en tiempos de reclusión. Por ejemplo, se pueden hacer las denuncias por videollamada y son los mismos Ministerios Públicos y no los operadores quienes atienden las llamadas. La activista compartió los protocolos exitosos que se han implementado a nivel internacional para prevenir eventos domésticos violentos. Un caso es Puerto Rico, país que opera un protocolo de identificación de víctimas y sobrevivientes de violencia de género en situaciones de desastres. “Las medidas que se han tomado (en Jalisco) no tienen un plan de nada, ni social ni económico, mucho menos en términos de los casos de violencia doméstica, este es un tema que nos tiene preocupadas”, finalizó.Con la finalidad de prevenir la violencia familiar y contra las mujeres en Jalisco, el Gobierno estatal implementó una estrategia en coordinación con la Fiscalía del Estado, la Secretaría de Seguridad y las comisarías municipales.Se trata del Plan Estatal Emergente de Prevención de Violencia Familiar ante el coronavirus COVID-19 “Quédate en Casa, Quédate Segura”, el cual consta de cinco etapas de reacción, según explicó la secretaria de Igualdad Sustantiva Entre Mujeres y Hombres (SISEMH), Fela Pelayo.Una de las acciones más importantes es la activación del “Código Violeta”, una estrategia de reacción inmediata para atender las emergencias de las mujeres y la violencia ejercida contra ellas.También se amplió la capacidad de refugios temporales para mujeres y niños. De acuerdo a la Fiscalía de Jalisco, el año anterior registró un aumento de casos de violencia familiar al acumularse 11 mil 053 casos, la mayor incidencia desde 2016, cuando se sumaron 11 mil 431 investigaciones, coincidiendo con el arranque del sistema penal acusatorio en Jalisco. La investigadora y académica Lucía Almaraz atribuyó los resultados principalmente a la política con la que se atiende este delito en Jalisco. “La política criminal va enfocada a otro tipo de delitos, como los patrimoniales y los homicidios dolosos, y deja de lado la violencia intrafamiliar porque no es un delito en el que existan acciones para atenderlo, prevenirlo y sancionarlo”, explicó.JL