En conferencia de prensa, ex trabajadores de la Unidad Asistencial para Personas Indigentes (UAPI), denunciaron afuera de las instalaciones del albergue, que no tienen claridad sobre su liquidación o recontratación luego de la extinción del Instituto Jalisciense de Asistencia Social (IJAS), así como preocupación por las personas internadas. Desde el primero de febrero trabajadores de la UAPI dejaron de laborar en el albergue. Ante la desaparición del Instituto de Asistencia Social (IJAS), la operación de la UAPI pasó a ser responsabilidad del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Jalisco (DIF).Víctor Hugo Ramírez, quien laboraba como psiquiatra en el albergue, denunció que desconocen "en qué consiste la liquidación, no sabemos si existe una recontratación y bajo qué modalidad sería, lo cual se traduce en incertidumbre", comentó el doctor. Alba Villanueva, ex psicóloga de la UAPI, también asegura que no han tenido información sobre lo que sigue para ellos.De acuerdo con el doctor Víctor Ramírez, los trabajadores de base que fueron separados de sus labores, tenían en promedio de 25 a 35 años de antigüedad. Tal es el caso de María Esther Quintanilla, quien fungía como coordinadora de trabajo social del albergue. "Yo soy cabeza de familia, tengo deudas, ¿con qué voy a pagar?", comenta la ex-trabajadora.También coincidieron que la separación con los pacientes se dio sin ningún tipo de transición donde se compartiera información adecuada del seguimiento que llevaban de cada uno de ellos. "El conocimiento de la población, su nombre, características, signos y síntomas también son de vital importancia. Creemos que se nos pudo haber llamado a capacitar, creemos que esto pudo haber sido de una manera distinta, con tiempos y formas precisos para salvaguardar la integridad de los pacientes", dijo Alba Villanueva. Al respecto, el secretario general de Gobierno, Enrique Ibarra Pedroza, dijo en una entrevista radiofónica que se abrieron mesas de diálogo para revisar la liquidación de los trabajadores y las eventuales recontrataciones.Mario Ríos, ex presidente de la Junta de Gobierno del IJAS, reiteró su inconformidad por la manera en la que se llevó a cabo la extinción de este instituto, "en ese proceso tan repentino en el que nos encontramos no tuvimos la oportunidad de entrar, literalmente, a una entrega- recepción (formal)", comentó. También externó su preocupación por los 350 trabajadores que fueron despedidos de las cinco dependencias que fueron transferidas al DIF Jalisco: la UAPI, los recintos funerales, el Centro de Terapias Especiales, los espacios de capacitación para el trabajo y del asilo "Leónidas K. Demos".LS