Este miércoles, el pleno del Supremo Tribunal de Justicia del Estado aprobó revocar el acuerdo tomado el pasado 9 de julio para interponer una controversia constitucional en contra de las reformas al Poder Judicial, mismas que fueron aprobadas en el Congreso el pasado miércoles.Con solo 18 magistrados presentes, se logró el quórum necesario para someter a votación la nueva propuesta, la cual se aprobó por unanimidad de los presentes.“Es un ejercicio democrático en el que se razonó un voto con toda la responsabilidad y de cara a la sociedad. Estamos convencidos de que tenemos que rendir mejores cuentas”, declaró el presidente del STJE, Ricardo Suro Esteves. Aseguró que, aunque hubo una estrategia de varios magistrados para evitar la votación, ello no significa que haya una fractura dentro del Poder Judicial. “Si hay algo personal con alguno de los compañeros los invito a que nos recompongamos y trabajemos. (...) No podemos hablar de ruptura, hablamos de diferencia de opiniones”.El presidente aclaró que, aún sin recurrir a la controversia, cada magistrado o juez puede interponer amparos particulares para defender su haber de retiro o evitar ser sometido a los controles de confianza. Rubén Jaime Flores Medina, investigador de la Universidad de Guadalajara, apuntó que solamente el pleno del STJE puede interponer una controversia constitucional, y que ésta es la única manera de anular los efectos de reforma al Poder Judicial. “Como no la hay, ésta subsiste en todos sus términos para quienes no impugnan, los que impugnan pueden hacerlo para que no le aplique la ley. (…) No puede haber controversia por grupos dentro del Poder Judicial, tiene que ser el órgano rector el que decide si va o no va”. El académico consideró además que la reforma no violenta su autonomía, pues el Poder Legislativo representa la voluntad de los ciudadanos y su función es establecer la ley. “El Poder Judicial, aunque es soberano, también se debe a la ley”. No asistieron a la sesión de este miércoles los magistrados que el martes se opusieron a la propuesta, cuando Manuel Higinio Ramiro Ramos propuso una moción suspensiva para analizarla antes de votar.El martes, al votar la mayoría contra la moción suspensiva, Ramiro Ramos abandonó el salón de plenos, junto con Lucía Padilla Hernández, Luis Enrique Villanueva Gómez, María Eugenia Villalobos Ruvalcaba, Rogelio Assad Guerra, Marcelo Romero García de Quevedo y Arcelia García Cásares, quien increpó al presidente, Ricardo Suro Esteves. “Qué lamentable que no tengamos un presidente que defienda al Poder Judicial”. La magistrada Lucía Padilla argumentó también que se iba porque desconocía lo que iba a votar, pese a que el 9 de julio, ella y los demás votaron por interponer la controversia contra la reforma al judicial, documento que nadie conocía. “Jamás he votado sin conocer el documento o el contenido de una petición, no me es factible asumir una votación de algo que desconozco”. Higinio Ramiro Ramos justificó ayer que la decisión les restaría autonomía. “No quiero ser cómplice de la entrega del Poder Judicial al resto de los poderes del estado de Jalisco”. Además de estos siete magistrados, tampoco asistieron a la sesión de este miércoles Óscar Carlos Trejo Herrera y Celso Rodríguez González. GC