La legisladora local de Morena, Érika Pérez García, reconoció que fue omisa en su declaración patrimonial, pero aseveró que no hubo dolo de su parte, al no haber incluido su relación matrimonial con Juan Carlos Tadeo Martínez Ramírez, accionista mayoritario de la empresa Abastecedora de Insumos para la Salud (Abisalud).Esta farmacéutica fue señalada en una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción por presuntamente ser parte de una red de empresas ligadas al súper delegado, Carlos Lomelí Bolaños, que han sido favorecidas por el Gobierno Federal con contratos millonarios para la compra de medicamentos.“La verdad fue un error el que tuve, no fue con dolo, fue algo de verdad se me pasó; yo soy abogada, pero esto tiene que ver más bien con algo técnico. Entonces yo vi conflicto de intereses, dije yo no tengo ningún conflicto de interés y no pasa nada, yo la llené (la declaración). Es algo que se puede corregir”, comentó.Pérez García dijo que no ha sido notificada del proceso que anunció la Contraloría interna del Poder Legislativo.La morenista argumentó que su liga familiar con el accionista de Abisalud no constituiría un conflicto de interés; apuntó que está siendo asesorada técnicamente para completar su declaración patrimonial y corregirla antes del último día de mayo, como establece la legislación.“Yo no puedo entrar en ese tema porque lo que tiene mi esposo y lo que tengo yo son carreras diferentes. Él está en su ámbito yo en el mío es muy diferente las cuestiones. En mi toma de decisiones nunca ha habido algo que interfiera para yo tomarlas”, expuso.Aunque presumió que ha sido una funcionaria pública con un actuar transparente, defendió que tras completar su reporte patrimonial podría reservarlo por cuestiones de seguridad. Argumentó que en su domicilio a detectado personas extrañas tomando fotografías.La legisladora morenista reapareció y fijó postura una semana después de que se publicó la investigación.LEE MÁS DEL TEMANM