Jalisco es una tierra de contrastes. Una tierra que conjuga muchas realidades y existencias que comparadas entre sí podrían parecer irreconciliables, pero que en su conjunto conforman lo que tenemos, quienes somos, el donde estamos. Costas bañadas de atardeceres, barrancas nubladas de pinos. Lagunas secas en cuyo horizonte enterregado se perfila el coloso azul del volcán; lago que en algún momento de nuestra historia se confundió con un océano.Ciudades, microuniversos, carreteras atravesadas como raíces; un millar de vidas. Complejos lujosos, fraccionamientos de Zapopan. Campos de equitación. Condominios arrastrados a las periferias, territorios de suburbanización. Colonias denominadas como las mejores del mundo, y desarrollos abandonados en Tlajomulco, melancolías del subdesarrollo.Tierra de mariachis, de tequila, de cultura mexicana, de música y de fiesta; tierra de desaparecidos, de madres buscadoras y carreteras tomadas, del miedo triste y cotidiano de salir y no regresar a casa. Tierra gentrificada, tierra paraíso, tierra en cuyo atardecer es imposible no ceder a los suspiros, tierra donde nacimos. Esto somos. Jalisco, oficialmente llamado Estado Libre y Soberano de Jalisco, tiene 121 municipios, es la tercera entidad más poblada de México, fue fundado el 16 de junio de 1823, y se adjudica de haber proporcionado muchas de las características que mundialmente se asocian con nuestro país. En primera instancia estuvo constituido como provincia del reino de la Nueva Galicia, después como Intendencia de Guadalajara, y finalmente, como estado. El nombre de Jalisco tiene una procedencia característica en comparación con los otros estados que conforman la República Mexicana, e incluso de su propia capital. Pues mientras Guadalajara proviene directamente de la ciudad y el municipio de España con el mismo nombre, Jalisco es resultado de la mezcla de tres palabras provenientes del náhuatl:De este modo, Jalisco (Xalli-Ixtli-Co) significa "en la superficie de arena" o "en el arenal". A lo largo de los siglos, Jalisco aparece en crónicas y mapas como "Xalisco", con el fonema original del náhuatl. La "x" se sustituyó por la "j", cuando esta se incorporó al alfabeto latino. De ese modo, nuestro estado pasó a oficializarse como "Jalisco". Con información de Gobierno de Jalisco. FS