Pese a ubicarse en zonas identificadas como de alto riesgo de contagios de COVID-19, los tianguis de El Baratillo y el de Polanco, en Guadalajara, volvieron a instalarse este domingo, con la aplicación de medidas para tratar de reducir el riesgo. Fueron instalados filtros sanitarios con la entrega de gel desinfectante y la toma de temperatura; se pidió a los visitantes que acudiera sólo un comprador por familia. En El Baratillo se instalan alrededor de 10 mil puestos, lo que representa unas 20 mil personas visitantes. Vía un comunicado, el Ayuntamiento de Guadalajara informó que en total operaron 19 filtros sanitarios en El Baratillo y cinco en el tianguis de Polanco. "De la mano con nuestros amigos comerciantes, estamos ayudando para que las personas que ingresen al tianguis todos vengan con su cubrebocas y su temperatura sea revisada", señaló Juan Manuel Munguía Méndez coordinador general de Desarrollo Económico y Combate a la Desigualdad. En el operativo de supervisión en ambos tianguis participaron 150 empleados municipales. También se informó que el tianguis de Rancho Nuevo no operó este domingo y se realizaron acciones de difusión de medidas sanitarias en la zona.jb