En siete meses de acciones en contra de ruidosos en Guadalajara, 10 establecimientos han caído en reincidencias luego de ser sancionados. Por estos motivos, los locales fueron clausurados, explicó Julián Enrique Cerda Jiménez, director de Inspección y Vigilancia del Ayuntamiento tapatío. Los operativos antirruido en Guadalajara comenzaron a llevarse con regularidad el 29 de marzo. A partir de ese día, las autoridades municipales efectuaron 33 operativos de manera semanal en establecimientos de la capital de Jalisco. Esto ha dejado un saldo de 148 infracciones en materia ambiental hasta el 27 de octubre.Cerda Jiménez estimó que seis de cada 10 sanciones son por exceso de decibeles. Adicionalmente, hay 47 infracciones por otras faltas al reglamento municipal.“Cuando vamos a un operativo de inspección solamente vamos con la intención de verificar el tema del ruido, pero nos encontramos con que en algún comercio hay algún tema de falta de renovación de licencia o que le hacen falta alguna serie de documentos elementales, u otras exigencias que exige la ley”, dijo el funcionario. Cerda Jiménez destacó que “hemos clausurado y los obligamos a que en sus locales pongan medidas de mitigación de tal manera que la molestia sea menor siempre”.A principios de octubre, el director general del Instituto de Información Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEG), Augusto Valencia, señaló que los municipios no estaban vigilando que la “Ley Antirruido” se cumpliera con el rigor necesario, debido a falta de capacitación por parte de los inspectores. Al respecto, Cerda Jiménez desestimó que los ayuntamientos estén relajando la vigilancia. “A final de cuentas esto es una carrera de resistencia. Nosotros hemos hecho operativos permanentes semana con semana”, afirmó el funcionario tapatío.
