Concluyó la crisis de la pandemia por el COVID-19, pero continúa la emergencia por la afectación a la salud mental y en adicciones, aseveró Pedro Briones Casillas, secretario técnico del Consejo Estatal Contra las Adicciones en Jalisco, quien informó que en los dos años de contingencia sanitaria a nivel internacional se han identificado 85 nuevas sustancias de consumo y a nivel estatal registran cambios en los patrones de consumo de sustancias y modificación en la edad de inicio."Se terminó la crisis de la pandemia del COVID, pero queda la verdadera crisis en la salud mental y el consumo de sustancias psicoactivas y como ha migrado a grupos etarios de niños y adolescentes. Vemos a través del sistema de vigilancia epidemiológica en el Estado que la edad de inicio de consumo de sustancias psicoactivas pasó, en algunas regiones del Estado, a los 5 o 6 años y que el patrón de consumo como droga de inicio ha migrado del alcohol a sustancias como metanfetaminas", detalló.En un foro sobre salud mental y adicciones organizado en el Congreso estatal, los especialistas coincidieron en la necesidad de reformar la atención en la materia. Francisco Javier Ramírez Barreto, director del Instituto Jalisciense de Salud Mental, consideró que el tema de adicciones debe dejar de criminalizarse y abordarse como parte de la atención a la salud mental. Refirió que en los años de pandemia incrementaron 400% las llamadas a la línea de intervención en crisis."Ha ido incrementando la incidencia de depresión y ansiedad, la pandemia vino a exponenciar más esta situación hablamos de cifras mayores de 30% de depresión, también de como golpeó a grupos vulnerables como niños y adolescentes", dijo.La presidenta del Colegio de Profesionales de Psicología del Estado, Esther Rodríguez Durán, propuso que la intervención psicológica se contemple en la atención de la salud, que se apliquen estrategias de prevención temprana en niños y adolescentes. Pidió reformas en materia laboral para reconocer el derecho a incapacitarse por afectación de la salud mental y que el pago de servicios psicológicos particulares sea deducible de impuestosLa académica del Iteso, Claudia Vega Michel, planteó modificar el modelo de atención actual y dar mayor capacitación al personal. Sostuvo que la gran apuesta debe ser la promoción de la salud mental y la prevención. Llamó a conformar un observatorio en el tema para diseñar las mejores políticas públicas y evaluar las estrategias.La diputada Susana de la Rosa Hernández, que impulsa una reforma en el tema, dijo que es necesario contar con los especialistas para construir los ajustes legales. La legisladora lamentó que la salud mental siempre ha sido un tema relegado y no se le ha dado la importancia que tiene.GC