Debido a la escasez de agua en la colonia Mezquitán, el taquero José Talamantes compra seis garrafones al día para las labores de limpieza de su establecimiento. Invierte 192 pesos. Esto también modificó su trabajo, pues ahora raciona labores como el lavado de trastes, carne y verdura, y la limpieza de los pisos del establecimiento.Desde marzo, los tandeos programados lo afectan, y en las últimas semanas apenas cae un chorro que aprovecha para llenar cubetas y tambos.