A través de redes sociales una alumna de la Universidad Panamericana (UP) compartió que se sintió en riesgo de haber sido privada de la libertad en las inmediaciones del plantel universitario donde estudia.Al respecto el vicerrector del campus, Rafael Hernández Cázares, informó que una vez que la joven dio aviso al campus se activaron los protocolos establecidos ante este tipo de situaciones, a fin de salvaguardar la integridad de la alumna.Explicó que se analizaron los videos de los alrededores del plantel educativo sin que se notaran movimientos extraños, pero que la joven, ante la cercanía del vehículo a ella se sintió amenazada, por lo cual, en primera instancia se le ofreció apoyo psicológico, y se activó un operativo para reforzar los patrullajes propios de la institución.“Afortunadamente no se llegó a más y quedó en la sospecha de la joven, en segundo lugar se exhortó a la comunidad educativa a que nos mantengamos alerta porque siempre los asaltos, secuestros, se facilitan cuando no estamos alerta. Por eso le pedimos a nuestra comunidad que hay que cuidarnos todos, que hemos de estar alerta a nuestro entorno, usar los estacionamientos de la universidad, evitar salir a la calle innecesariamente, por precaución”, expresó el vicerrector.Por otra parte, señaló que ante el miedo generalizado se mantiene contacto, desde el primer momento, con las autoridades, tanto con la Policía de Zapopan, que se acercó al plantel educativo tras conocer del hecho a través de redes sociales, como del Gobierno Estatal que, de acuerdo con el vicerrector los mantiene informados tanto sobre los reportes que han resultado reales como de los falsos.En medio de la psicosis derivada de mensajes enviados a través de aplicaciones como WhatsApp sobre presuntas privaciones de la libertad “en serie”, la semana pasada el Fiscal Estatal, Luis Joaquín Méndez, dio a conocer que se tenían tres denuncias ante la dependencia de jóvenes estudiantes de preparatoria que presuntamente había sido víctimas de privación de la libertad por algunos instantes.Aunque indicó que no se tenían pruebas suficientes para constatar que estos habían ocurrido, no dejaban de investigarse, además de que, insistió, los audios son falsos.Lo anterior, ocurrió luego de las protestas llevadas a cabo por la comunidad estudiantil de la Universidad de Guadalajara, luego de que se dieran a conocer los reportes de varios casos similares, por lo cual exigieron a las autoridades estatales que se reforzara la seguridad en torno a los planteles educativos y se actuara en contra de los “giros negros” de venta de alcohol, e incluso, drogas.